
Nadie quiere la vuelta del turismo masivo
11 de agosto de 2021 EconomíaTradicionalmente, el turismo y el transporte se han considerado por separado pero el concepto actual incluye a la movilidad como un requisito previo para el turismo y no una parte integral del mismo.
La actividad turística es responsable de entre un 5% y un 8% de la huella de carbono mundial, lo que supone alrededor de 4,5 millones de toneladas de CO2 anuales, la mayoría de ellas derivadas del transporte. Esto ha llevado al desarrollo de diversos planes estratégicos internacionales dirigidos a conseguir un turismo más sostenible y de calidad, que incorporen sistemas de movilidad más eficientes y bajos en emisiones.
13 millones más de turistas visitarán Europa cada año entre 2018 y 2030. Esto conlleva una serie de desafíos que contemplan paquetes de medidas integrales para cada destino, las cuales vayan en busca de la sostenibilidad, nuevos modelos de negocio y también la satisfacción del viajero.
“Hemos visto como una mala gestión de la movilidad puede llevar a la destrucción de los atractivos turísticos de una determinada región, mientras que una buena gestión de la misma puede implicar la adición de valor e, incluso, la posibilidad de incrementar su atractivo y valor turístico”, afirma Serra.