Por su parte, el crudo Brent, de referencia en Europa y en el resto de mercados internacionales, avanza un 0,8%, hasta 86,26 dólares, y se mantiene en máximos de tres años (octubre de 2018).
Todo ello en un entorno en el que cada vez son más los analistas que anticipan precios altos para el precio del crudo durante los próximos años, debido a que la transición energética hacia energías renovables limitará la producción futura de petróleo, mientras la demanda seguirá siendo elevada a corto y medio plazo. Además, la política de la OPEP+ de aumentar su producción de manera progresiva, en un entorno de recuperación económica mundial, mantiene elevado el precio del 'oro negro' en el corto plazo, en un clima de crisis energética mundial.