Sin embargo, el inicio de las vacaciones de semana Santa tiene un color totalmente distinto. Y es que, por ejemplo, los resultados de las encuetas de eta ultima semanas apuntan a un cambio, a un vuelvo totalmente distinto, Así, por ejemplo, la posible opción de que Sánchez haga un movimiento desesperado tratando de lograr una moción de censura contra Moreno en Sevilla, el popular apuesta por ganarle la partida y al igual que hizo Diaz Ayuso, el presidente andaluz se prepara para disolver las Cortes después de Semana Santa e ir a las urnas en junio. No hay confirmación oficial, sino oficiosa.
El PP engrasa su maquinaria electoral bajo el "efecto Feijóo", que a nivel nacional ya ha desbancado en los sondeos al PSOE en menos de una semana como líder del principal partido de la oposición. En el otro bando, el ambiente es de derrota. Sánchez da por imposible recuperar el emblemático bastión socialista. La estrategia pasa por potenciar el papel presidencialista aprovechando la guerra en Ucrania. Sortear un nuevo varapalo que se sumaría a los cosechados en Galicia, Madrid, Castilla y León…
La realidad es que desde que se asoció con Iglesias no levanta cabeza electoral. Pero, además, Andalucía ha ido históricamente la clave de las generales. Muchos expertos señalan que quien gana en Andalucía gana las nacionales. De hecho, así ha sido en los último cuarenta años.
Así que Sánchez y sus mariachis, arrancan sus vacaciones sumidos en un mar de dudas.