El planteamiento de este partido, que también ha sido el que compartía una “inmensa mayoría” de las fuerzas políticas de la izquierda en Cataluña y “en el conjunto del Estado”, era la derogación de las reformas laborales de 2010 y 2012.
Así lo explicó Aragonès en una entrevista en TVE donde señaló que por este motivo su partido ahora está “muy lejos” del acuerdo que ha habido con los agentes sociales y “si bien es cierto” que aquí hay un “punto de encuentro” con los sindicatos y la patronal, “también es cierto” que quien vota en el Congreso no son ellos, sino que “votan los diputados”.
Quiza por eso, esa misma noche Diaz invitaba a cenar a Aragonés.