Supone 0,8 puntos porcentuales menos que a finales de 2023 y 3 menos que en el mismo trimestre del pasado año.
No obstante, son 10.053 millones más que en el segundo trimestre y 57.304 millones más que en el mismo periodo de 2023. En términos interanuales, la tasa de crecimiento del saldo de deuda fue del 3,6%. En concreto, el saldo de la deuda del conjunto de la Administración Central se elevó a 1,504 billones de euros al cierre de septiembre, lo que representa el 96% del PIB. El crecimiento, en términos interanuales, de la deuda de este subsector en el tercer trimestre de 2024 fue del 4,7%.
Por lo que respecta a las administraciones territoriales, la deuda de las CCAA creció hasta los 333.177 millones de euros, un 21,3% del PIB, con un aumento interanual del 2,4%, mientras que la deuda de las corporaciones locales se situó en 23.111 millones de euros en el tercer trimestre, lo que representa un 1,5% del PIB y supone un 0,6% menos que el saldo registrado un año antes.
Por su parte, el saldo de deuda de la Seguridad Social se situó en 116.171 millones de euros, un 7,4% del PIB, con un crecimiento interanual del 9,4%.
En cuanto a la evolución de la deuda por instrumentos y plazos, la deuda materializada en valores a largo plazo experimentó un crecimiento interanual del 5,8%, mientras que los préstamos a más de un año se redujeron en un 6,7% con respecto a septiembre de 2023. La tasa de variación interanual en el tercer trimestre de los instrumentos a corto plazo presentó un descenso del 8,3%.
Atendiendo a la distribución del saldo según este desglose de instrumentos, en septiembre la deuda se encontraba materializada principalmente en pasivos a largo plazo, al representar un 94,8% del total, siendo especialmente significativo el peso de los valores a largo plazo con un 85%, mientras que el porcentaje de la deuda a corto plazo era de un 5,2%.