Y, dentro de las actividades con buenas expectativas de ocupación, han detectado cuáles son aquellas que cuentan con importantes porcentajes de empleados con más de 60 años, en cuantías superiores a la media de afiliados a la Seguridad Social. “Esto supone una pérdida de mano de obra en un futuro próximo (…) e implica la necesidad de reponer a estos trabajadores en un corto espacio de tiempo”, indican desde el SEPE.
Según esto, el 8,7% de los cotizantes a la Seguridad Social son actualmente mayores de 60 años, pero hay sectores que superan dicho porcentaje y, por tanto, se convierten en los nichos de empleo más envejecidos o, como indica el documento del SEPE son las “actividades mejor posicionadas en cuanto al empleo de reposición”. Así, señalan que son precisamente las actividades relacionadas con la asistencia a mayores, tanto en residencias como en centros asistenciales –conocidos como centros de día– las que cuentan con un mayor volumen de trabajadores de más edad, ya que prácticamente el 15% de todos los empleados en el sector tiene más de 60 años.
En este sector se registra, además, el mayor incremento de trabajadores de más edad el pasado año; y en las actividades de servicios sociales sin alojamiento las plantillas se recortaron más de un 10% en 2022. De hecho, desde el SEPE advierten de que “según la actividad económica de la que se trate (el envejecimiento de los empleados) podría ser una oportunidad para disminuir plantilla y adaptarla a las necesidades del mercado o para anticiparse y buscar perfiles con conocimientos que puedan sustituir a esas personas”. Tras los servicios sociales y de atención residencial, la siguiente actividad con más concentración de trabajadores mayores fue la de actividades inmobiliarias. Si bien, el sector envejecido con mayor peso en el tejido productivo fue el de los transportes por carretera y por tubería, donde además el empleo de los trabajadores de más edad creció por encima de la media del sector el pasado año. El caso del transporte es, además, uno de los que más falta de mano de obra está experimentando, según la patronal. De hecho, empresas del sector están formando actualmente conductores en Marruecos.
Este estudio del mercado de trabajo realizado por el SEPE analiza también los distintos grupos de cotización a la Seguridad Social, detectando que la mayor proporción de empleados mayores de 60 años se registra entre los oficiales de primera y segunda. Estos han sido, además, el colectivo que más ha envejecido, ya que en 2021 el 7,4% de los trabajadores con estas categorías tenía más de 60 años y ahora son el 18% de todos ellos. En segundo lugar, los ingenieros y licenciados son los que mayor proporción de mayores tienen, el 13,4% frente al 7,5% del año anterior.
Por el contrario, hubo categorías laborales que rejuvenecieron, como por ejemplo los jefes administrativos entre los que los mayores pasaron de representar el 6% del total en 2021 al 5% en 2022. Y lo mismo ocurrió entre los ayudantes no titulados, donde los mayores de 60 años pasaron de ser el 7,5% al 3,8% en un año.
Asimismo, la inmensa mayoría de los trabajadores más envejecidos en las actividades con mejores perspectivas de empleo (ver gráfico) eran asalariados del régimen general de la Seguridad Social, salvo en los sectores de servicios más avanzados para las empresas como los financieros y de seguros, donde el 72% de los autónomos son mayores de 60 años; las actividades jurídicas y de contabilidad, que tienen un 57% de autónomos mayores de esa edad; y el sector inmobiliario, con más de la mitad de trabajadores autónomos mayores.
En general, sin tener en cuenta el factor de envejecimiento, desde el SEPE apuntan a las siguientes profesiones como las de mayores oportunidades de empleo en el corto plazo: servicios de comidas y bebidas; comercio al por menor; servicios de alojamiento; educación; transporte terrestre y por tubería; asistencia en establecimientos residenciales; y programación, consultoría.