En un año marcado por las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania y la subida de precios, el número de empleados en las grandes empresas creció un 5,2% interanual, mientras que las ventas totales se incrementaron un 5,9%.
El salario de los trabajadores de grandes empresas –medido como rendimiento bruto medio– creció en 2022 un 3,7%, el mayor incremento registrado desde 2008, aunque muy por debajo del 5,7% con el que cerró la inflación en diciembre, como consecuencia, sobre todo, de la incorporación a los sueldos de parte de las subidas de precios que se fueron produciendo a partir de la segunda mitad de 2021, según se desprende de la estadística sobre ‘Ventas, Empleo y Salarios en grandes empresas’ publicada por la Agencia Tributaria.
En un año marcado por las consecuencias económicas de la guerra en Ucrania y la subida de precios, el número de empleados en las grandes empresas creció un 5,2% interanual, mientras que las ventas totales, deflactadas y corregidas de variaciones estacionales y de calendario, se incrementaron un 5,9%.
En cuanto a las ventas de las grandes empresas, la evolución del 5,9% en 2022 fue impulsada tanto por el crecimiento del 4,7% en las ventas interiores, como por el alza del 9,6% en las exportaciones. Las importaciones, por su parte, se incrementaron solo un 1,7%, frente a la subida del 10% registrada el año pasado.
En cuanto a las ventas interiores, fueron las de consumo (7,1%) y bienes intermedios (4,4%) los que impulsaron el repunte. También crecieron las ventas de capital (2,3%), donde destacan las de equipo y software, que subieron un 7,8%. Por el contrario, las ventas de construcción se desplomaron un 8,5%, frente a la caída del 1,3% del año 2021.
De su lado, dentro de las exportaciones destacan las dirigidas a países de la Unión Europea, que registraron un aumento del 10,8%, por encima del crecimiento de las destinadas a terceros países (8,4%).
En lo que se refiere solo al mes de diciembre, las ventas totales de las grandes empresas, deflactadas y corregidas de variaciones estacionales y de calendario, crecieron en diciembre un 3,2%, 1,4 puntos por encima de la tasa registrada en noviembre. Es la primera vez que la tasa del mes es superior a la anterior desde que en mayo se iniciase una tendencia de progresiva moderación.
Las ventas interiores se incrementaron en diciembre un 2%, si bien el comportamiento en diciembre fue heterogéneo: mientras que las ventas de consumo repuntaron hasta el 2,4%, las de capital moderaron su ritmo de crecimiento hasta el 1,5%.
Por otra parte, las exportaciones repuntaron en diciembre hasta el 7,5%, como consecuencia de la aceleración experimentada por las ventas dirigidas a terceros países (+9,3%), ya que las destinadas a la UE mantuvieron un tono similar al mes precedente (+5,2%).
El crecimiento del número de perceptores de rendimientos del trabajo, indicador fiscal del empleo asalariado, se situó en diciembre en el 2,8%, siete décimas menos que en noviembre, dentro de la progresiva moderación que, como en las ventas, se aprecia desde mediados de año.
Por su parte, el rendimiento bruto medio, como se ha ido señalando a lo largo del año, fue el que supuso una mayor novedad respecto al pasado. Así, terminó el año con un incremento del 3,7%, el mayor desde 2008, como consecuencia, sobre todo, de la incorporación a los salarios de parte de las subidas de precios que se fueron produciendo a partir de la segunda mitad de 2021.