En un acto celebrado en Madrid el líder de los populares ha subrayado este domingo que su partido multiplicó por tres su presencia en los gobiernos de las capitales de provincias, lo que significa que «el PP ha empezado a romper los bloques y eso es muy importante». «Ayer se confirmó el vuelco y empezó el cambio político en España», ha dicho Feijóo ante numerosos miembros de la dirección nacional, presidentes autonómicos y alcaldes del PP, en el acto «Pasar página e iniciar el cambio en España», celebrado en el parque del Retiro de Madrid.
En una intervención en la que no se ha referido en ningún momento a los pactos con Vox, ha señalado que «España está harta de que la polaricen y la atrincheren los supuestos progres contra los supuestos fachas». Feijóo ha insistido en que se ha acabado la política de bloques. «Hasta aquí, ni conmigo ni contra mí, ni a un lado o a otro, ni con unos ni con otros, el PP va hacia adelante haciendo mayoría en España, este es nuestro compromiso, se acabaron las trincheras, se acabaron los bloques, se acabaron las divisiones, se acabaron las zanjas, vamos a por la mayoría y vamos a cumplir nuestro deber en el gobierno o en la oposición», ha recalcado. El líder popular ha pedido el apoyo de los españoles y ha advertido de que «solamente romperemos la política de bloques de forma definitiva con una mayoría sólida y suficiente. No tengo ninguna duda de que es la mejor fórmula».
Tampoco ha dudado al asegurar que el Partido Socialista «jamás nos habría dado el apoyo que nosotros le hemos dado en Barcelona, pero no me importa, hemos cumplido con nuestro deber y hemos hecho una política de Estado porque somos el partido de la garantía». Frente a partidos de «uno y otro lado» que «nos criticarán por haber pactado con ellos o con otros» y a los que les une el mismo objetivo, que España siga igual, Feijóo ha contrapuesto un PP que quiere cambiar el país.»Y lo mejor es que estamos empezando a hacerlo», ha afirmado. El líder de los populares ha pedido a sus alcaldes y presidentes autonómicos que las mayorías absolutas no se conviertan en soberbia, sino que sean el marchamo de la humildad: «Siempre humildad en la derrota y más en la victoria», les ha dicho.
Preservar el valor de la palabra y hacer una política de Estado son los dos principios que ha reivindicado Feijóo. A 35 días de las elecciones generales y entre gritos de «presidente», el líder popular ha asegurado que los comicios del 23 de julio «no son una incomodidad, son una oportunidad para derogar el sanchismo». «Miradlo así, es una oportunidad histórica, no es solo un gasto extra, es una oportunidad de ahorrarnos el gobierno más caro de la democracia, no son un día perdido de las vacaciones, son cuatro años ganados», ha dicho dirigiéndose a los ciudadanos para animarles a votar.