La instalación, que está previsto que pueda ponerse en marcha en 2025, tratará 140.000 toneladas/año de residuos agroindustriales y ganaderos de la zona, y generará 60 GWh de gas renovable al año. Esta producción equivale al consumo anual de 16.000 viviendas y evitará la emisión a la atmósfera de 15.000 toneladas de CO2/año, una cantidad equiparable a la plantación de 25.000 árboles.
Con este proyecto, tanto Naturgy como Compost Segriá, Sitra y Servei de Gestió Ramadera muestran su apuesta decidida por la transición energética, la producción de energía renovable a nivel local y la gestión de residuos, ya que aportará un gas limpio al sistema energético y contribuirá a la gestión sostenible de los residuos agroindustriales y ganaderos de la zona.
El biometano generado en la planta de Torrefarrera será inyectado directamente a la red de gas de Nedgia, la distribuidora de gas del grupo Naturgy, que está totalmente preparada para vehicular gases renovables gracias a las inversiones realizadas por la compañía en los últimos años.
La mayor parte de los residuos que se revalorizarán para generar energía en esta planta se gestionan actualmente en la planta de compostaje de Compost Segrià, anexa a la futura instalación de biometano. Adicionalmente, el proyecto se complementará con la producción de abonos y fertilizantes orgánicos, que podrán ser utilizados en campos de cultivo locales.
El gas renovable es una energía verde con balance nulo de emisiones, que es totalmente intercambiable por el gas natural, por lo que puede distribuirse a través de la infraestructura gasista existente y emplearse con las mismas aplicaciones energéticas en hogares, industrias, comercios y también para movilidad en el transporte, contribuyendo a la descarbonización. La producción de gases renovables está alineada con el recientemente aprobado paquete REPowerEU, el plan europeo para reducir la dependencia de los combustibles fósiles y avanzar en la transición verde. Dentro de este plan, el biometano juega un papel clave para ir sustituyendo el uso del gas natural en los próximos años.
Sin embargo, este gas renovable aún tiene un largo desarrollo en España y requiere para su impulso de mecanismos de apoyo similares a los existentes en otros países del entorno como Francia o Alemania. España es el tercer país de Europa por potencial de producción de este gas de origen limpio y podría llegar a producir la cantidad equivalente al 40% del consumo de gas convencional, según un informe reciente publicado por Sedigas.