Según la Comisión, esta reducción de la competencia podría dar lugar a «aumentos de precios significativos» para «los clientes minoristas afectados en todo el mercado español».» Los efectos anticompetitivos previstos son sustanciales incluso después de tener en cuenta los posibles ahorros de costes, en un contexto en el que la competencia ha sido una fuerza impulsora de la inversión y la calidad de los servicios en el mercado español», apuntan. No obstante, cabe destacar que Bruselas no ha hecho mención a la preocupación que le causaba esta operación por sus posibles efectos en el mercado mayorista y minorista.
La Comisión Europea tiene ahora hasta el 4 de septiembre para tomar una decisión final y dar así el visto bueno o bloquear este acuerdo de fusión. El acuerdo fue notificado inicialmente el pasado 13 de febrero, mientras que Bruselas abrió una investigación en profundidad el pasado 3 de abril.
Orange y MásMóvil son el segundo y cuarto operador, respectivamente, de España. La fusión entre ambas compañías daría lugar al mayor operador del mercado nacional, con importantes marcas como Yoigo, Jazztel, Simyo, Virgin o Pepephone que operarían bajo el paraguas de la nueva compañía.