Sánchez el que mas miente
El secretario general del PSOE ha presentado el programa electoral de cara a los comicios del próximo 23 de julio. En él se incluyen medidas como la gratuidad del transporte urbano hasta los 24 años o eliminar el coste de la universidad para aquellos estudiantes que vayan aprobando todo. También ha prometido una cuenta bonificada de ahorro joven para vivienda. En concreto, entre las medidas destinadas a los jóvenes, Sánchez ha explicado que si logra encabezar un futuro Gobierno establecerá la gratuidad total del transporte público urbano para niños y estudiantes hasta los 24 años. Además, impondrá la gratuidad de los estudios universitarios y de Formación Profesional Superior para los que hayan aprobado las asignaturas a la primera. En materia de educación quiere crear 250.000 nuevas plazas de FP.
En cuanto a la vivienda, ha asegurado que se construirán 183.000 viviendas públicas para alquiler y garantizando que la mitad vaya destinada a jóvenes. Además, Sánchez ha anunciado la creación de una cuenta de ahorro bonificada destinada a los jóvenes para la compra de la primera vivienda que permitirá ahorrar hasta 30.000 euros libres de tributación. En tema laboral, el presidente del Gobierno ha prometido que pondrá en marcha una estrategia nacional para el trabajo flexible. Según ha explicado, se implantará con un paquete de medidas y de reformas legales y de incentivos a las empresas para que ofrezcan a los trabajadores mejor conciliación en su vida personal y laboral. Sánchez se ha marcado el objetivo de bajar la tasa de paro al 8% a través de un gran acuerdo social por el pleno empleo.
Sumar busca crear un banco público
El partido político liderado por Díaz quiere trasladar el modelo del ‘banco para el desarrollo’ alemán para impulsar la productividad del país a través de la financiación de proyectos de renovables o vivienda pública.
La plataforma liderada por Díaz presentaba este jueves su programa electoral para las próximas elecciones generales del 23 de julio, en el que la economía juega un papel fundamental. Sumar ha distribuido el conjunto de medidas en cinco puntos y el ámbito económico protagoniza el primero de estos pilares. Entre otras medidas como la reducción de la jornada laboral, elevar el IRPF para las rentas más altas o regular los depósitos, la coalición de izquierdas ha propuesto la creación de un Banco de Inversión para la Nueva Economía. Este organismo aunaría otros ya existen como el ICO, COFIDES, CDTI, ENISA con el objetivo de canalizar la financiación para proyectos de sectores estratégicos como el de la energía renovable, la construcción de vivienda pública o su rehabilitación.
El BINE toma como modelo el Kredintanstalt für Wiederaufbau alemán (KfW), conocido como Banco de Desarrollo, por tanto, aspira a enfocar la inversión tanto pública como privada. Sumar cree que es oportuno que el Estado tome un papel más activo en los sectores económicos que entienda más interesantes para la modernización de la economía, esto es, estratégicos y que además lo haga de la mano de las empresas de reducido tamaño, mayoritarias en el país y las que a menudo encuentran más dificultades para dar con estas vías de financiación.
Además de la integración del Instituto de Crédito Oficial (ICO), que ahora depende del Ministerio de Asuntos Económicos, la Compañía Española de Financiación del Desarrollo (COFIDES) y la Empresa Nacional de Innovación (Enisa) que penden del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, y el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), ahora dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación, Sumar aspira a llevar a cabo una «simplificación y mejora de la arquitectura financiera pública estatal» para mejorar la eficiencia, el alcance y aumentar los recursos disponibles de estos organismos.
VOX apuesta por las rebajas fiscales
Vox ha incluido en su programa económico para las próximas Elecciones Generales del 23 de julio una iniciativa para eliminar el IVA en la adquisición de la primera vivienda y reducirlo de forma «radical» en bienes y artículos de primera necesidad.
El secretario de Organización de Vox, Jorge Buxadé, y el portavoz económico del partido, Iván Espinosa de los Monteros, han desgranado este viernes las diferentes propuestas económicas que defenderán en los comicios electorales. Estas, han dicho, tienen la intención de huir del «continuismo» que plantean el resto de formaciones políticas. Y es que, a su juicio, el proyecto económico idóneo para España «no se trata de bajar o subir un punto porcentual de uno u otro impuesto», sino de «construir una alternativa completa a las políticas de los partidos que han pastoreado España en las últimas cinco décadas».
Es por ello que han aseverado que la intención del partido es llevar a cabo la «mayor reforma fiscal de la historia reciente de España». Sobre a qué se refieren esos artículos de primera necesidad, se trata de productos y fármacos infantiles, pañales o productos geriátricos, entre otros. «Lo que realmente para las familias es absolutamente imprescindible», ha destallado Buxadé.
Sin salir del IVA, la formación liderada por Abascal propone también revertir la subida de este impuesto que acometió el Gobierno de Mariano Rajoy en 2012, porque consideran que se ha hecho «permanente y corrosiva» para la economía española. Así, pretenden pasar de nuevo a un tipo reducido del 8% (frente al 10% actual) y un tipo general del 18% (frente al 21% actual). También quieren los de Abascal revertir las supuestas subidas de más de 17 puntos en el material escolar, así como en cines y peluquerías, entre otros productos y servicios.
Adicionalmente, Vox plantea eliminar de forma progresiva otros impuestos sobre el consumo y otros que consideran «ideológicos», en relación a los gravámenes sobre actividades contaminantes, que reciben comúnmente el nombre de impuestos verdes.
En su reforma fiscal, la formación plantea una rebaja «radical» del IRPF para todos los españoles, con la intención de alcanzar una estructura del impuesto con dos tipos únicos. Más concretamente, plantean un tipo único reducido del 15% a aplicar sobre bases imponibles inferiores a 70.000 euros y un tipo ordinario del 25% a aplicar a bases superiores a dicha cantidad. También se aplicaría una exención de 22.000 euros anuales de rentas del trabajo, con independencia de tener uno o dos pagadores.
En esta reforma del IRPF se produciría una reducción progresiva del gravamen en función del número de hijos, de forma que se reduzcan cuatro puntos por cada hijo. Con esta fórmula, una familia con cuatro hijos y rentas inferiores a 70.000 euros no pagaría el impuesto sobre la renta, mientras que en rentas superiores, el tipo sería del 9%.
Por otro lado, Vox también quiere que el ahorro deje de tributar por su, dicen, «falso incremento» provocado por la inflación, incluyendo tablas de actualización automática. También pretenden que las pensiones contributivas estén exentas del IRPF por «justicia con quienes han tributado durante toda su vida laboral». A esto se sumaría una equiparación del IRPF y del Impuesto de Sociedades, de manera que los ciudadanos «sean libres de decidir si actúan como personas físicas o a través de sociedades de capital».
Además del IVA ‘cero’ en la compra de una primera vivienda, los de Santiago Abascal también quieren deducciones en los costes del alquiler vinculados al hogar, a la educación de los hijos y la contratación de personal; y en la inversión en vivienda habitual.
En el programa económico también se incluye una propuesta para eliminar el Impuesto sobre el Patrimonio, el de Sucesiones y Donaciones y el de Plusvalías municipales en todo el territorio nacional. Vox considera que estos tributos suponen «confiscaciones injustas, duplicadas o desproporcionadas del patrimonio de los españoles». Sumado a esto plantean que el Estado recupere la gestión del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados, para reducirlo del 1,5% actual a un 0,5%; y bonificar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales en cuota del 100% para la compra de una vivienda habitual igual o inferior a 300.000 euros. En otros casos se reduciría al 6% y al 3% en familias numerosas.
Aquí también incluyen una propuesta para modificar la Ley Reguladora de Haciendas Locales para aumentar los supuestos de bonificación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles, como en el caso de las familias en las que uno de los cónyuges decida dedicarse al cuidado de sus hijos.
En el plano fiscal y laboral, Vox ha planteado bonificaciones al 100% de las cotizaciones sociales durante el primer año de un trabajo indefinido y al 50% durante el segundo año. También proponen una reducción generalizada de las cotizaciones para que suban los salarios netos reales de los trabajadores. A juicio de Buxadé y Espinosa de los Monteros, esta es una propuesta alternativa que pone «en el centro al contribuyente para dejar de ser súbdito de las agencias tributarias que proliferan en España». Por otro lado, el partido aboga por la recuperación del Estatuto y el Consejo de la Defensa del Contribuyente, que estaría conformado por expertos independientes en materia tributaria del silencio administrativo positivo a favor del contribuyente.
De su parte, también han presentado un plan de ayudas a la conservación de empresas familiares y centenarias mediante incentivos para mantener la actividad y el empleo, facilitando así el relevo generacional. También defiende la formación dotar de incentivos a empresas radicadas en zonas especialmente poco pobladas.
Por último, se ha hecho una mención expresa a la tributación de las grandes tecnológicas en España. En este sentido, los responsables de Vox han defendido que estas empresas paguen en España «todos los impuestos que les corresponden». Más concretamente, los de Abascal se refieren al tráfico de datos a través de las redes sociales y el negocio que las empresas hacen con el mismo. «Sin saberlo, nos están expropiando digitalmente y haciendo dinero habitualmente en forma de publicidad», ha explicado Buxadé.
Por ello, defienden que las tecnológicas que manejan estas redes sociales y que tienen actividad en España paguen por ceder los datos a terceros que se encuentren fuera de España.
De hecho, en su programa Vox incluye un punto para crear una pasarela de datos de obligado peaje para las grandes tecnológicas extranjeras que quieran sacar a sedes extranjeras datos obtenidos en territorio nacional. El mecanismo en cuestión implicará el pago de un porcentaje al particular del que se obtengan los datos, además de la correspondiente tributación. Asimismo, el partido quiere reforzar los mecanismo de persecución de la evasión fiscal para que toda la economía sumergida digital se incorpore a la economía real y aporte al Producto Interior Bruto (PIB).