El organismo no encuentra problemas para la competencia en una operación que permitirá a la energética alcanzar los dos millones de clientes de luz y gas en la Península Ibérica, logrando de esta forma la meta fijada en su plan estratégico 2021-2025 y, sobre todo, consolidarse como el cuarto operador español en número de clientes de electricidad.
La transacción ya llevaba el viento de cola que le proporcionó la junta general de accionistas de CIDE Servicios Comerciales, que es el propietario actual del 100% de la comercializadora CHC Energia, que aprobó la compra por parte de Repsol de esta participación mayoritaria.
La energética, con este movimiento, se hace con el control de una de las mayores comercializadoras de electricidad y gas de España, con un amplio posicionamiento en entornos rurales y pequeños municipios. Además, la gestión de la comercializadora será compartida y se mantendrá el equipo liderado por Mariola Martínez Herrera, como directora general de CHC Energía. En este sentido, se realizará un reparto en el consejo de administración a partes iguales y se asegura la independencia de los sistemas operativos y del ‘back office’.
Desde la adquisición de los activos de Viesgo en 2018 y su entrada en el negocio eléctrico, la compañía ha ido diversificando su negocio y aumentando su cartera de clientes de electricidad, tanto a través de su estrategia comercial como de compras en el sector. Así, en 2021 se hizo con la mayoría de la empresa comercializadora de electricidad y gas Gana Energía, participada por Angels -la sociedad de inversión de Juan Roig-, o en 2022 adquirió la cartera de 25.000 clientes eléctricos residenciales y pymes de Capital Energy.
Además, también el año pasado, alcanzó un acuerdo con Grupo Dominio para adquirir y dar suministro a los cerca de 100.000 clientes de energía de Alterna, la que era la comercializadora eléctrica de la firma vasca.