En estos momentos, el FROB está siendo asesorado por Arcano, que se hizo con el contrato en 2020 poco después de que se completase la fusión entre ambas compañías y en pleno cambio directivo en el FROB, ya que en noviembre de 2020 Paula Conthe asumía la presidencia del ente. La extinción del contrato, que finaliza el próximo octubre y no cuenta con posibilidad de prórroga, ha provocado que el Estado haya empezado a moverse para comenzar un nuevo proceso de adjudicación, según asegura ‘Cinco Días’,.
En estos momentos, el valor de la participación pública en CaixaBank se ha duplicado y asciende a más del 150% gracias a los repuntes experimentados en los últimos trimestres como consecuencia del endurecimiento de los tipos de interés para hacer frente a la inflación. El valor, que ayer cerró la sesión en 3,8250 euros, eleva la participación del FROB en CaixaBank hasta los 4.900 millones de euros.
Lo cierto es que, en los cinco años que Nadia Calviño ha ostentado la cartera de Economía, el Ejecutivo no ha vendido ni una sola acción de CaixaBank. Durante el Gobierno del Partido Popular presidido por Mariano Rajoy, el entonces ministro de Economía y ahora vicepresidente del Banco Central Europeo, de Guindos, aprobó dos desinversiones: en 2014 se vendió un 7,5% de Bankia por 1.300 millones de euros y en 2017, un 7% por 800 millones. Hasta el momento, el FROB ha recuperado, mediante los dividendos pagados por Bankia y posteriormente por CaixaBank, unos 1.400 millones de euros. El Fondo ha calculado que solo se podrán recuperar unos 6.000 millones de euros de los 22.000 millones destinados al rescate de Bankia.
Por otro lado, hay algunas dudas sobre cuál será la hoja de ruta del Gobierno que salga de las urnas en las elecciones generales que se celebrarán el próximo 23 de julio. De hecho, ningún partido político hace referencia a la venta de acciones de CaixaBank en su programa electoral.