Las condiciones soportadas por este centro de transformación, recientemente renovado con la última tecnología en automatismos de baja tensión, han derivado en el sobrecalentamiento de la instalación eléctrica y su total deterioro. Este centro de transformación contaba con dos máquinas transformadoras con una potencia total instalada de 2.000 KVA, es decir estaba preparado para poder ofrecer suministro a 1.200 clientes.
El número total de clientes con contrato en vigor que se abastecían desde esta instalación eran 200, por lo que este centro estaba capacitado para atender 6 veces más suministros de los contratados.
Además, Endesa había instalado el pasado mes de agosto de 2022 otro centro de transformación en las inmediaciones (C/ Nogal) de otras 2.000 KVA y con capacidad para otros 1.200 clientes, para descargar al centro de transformación incendiado en la pasada madrugada. Es decir, entre los dos centros de transformación la red tenía potencia suficiente para dar suministro a unos 2.400 clientes en la zona, doce veces más suministros de los 400 con contrato en vigor en este entorno urbano (200 por centro de transformación).
Asimismo, el pasado 23 de junio, técnicos de Endesa finalizaban los trabajos de instalación de la tecnología más puntera para el control remoto de la propia instalación acompañados de un dispositivo de Policía Nacional por seguridad de los trabajadores
La digitalización del centro de transformación se realizó mediante la sustitución de los cuadros de baja tensión por nuevos cuadros telemandados, que permiten maniobrar sobre la instalación de baja tensión a distancia. Esto supone que, ante cualquier sobrecarga de la red, cuando las protecciones (fusibles) del cuadro de baja tensión saltan por seguridad se pueden volver a activar de forma remota, reduciendo de este modo el tiempo de reparación del suministro y garantizando la seguridad de los trabajadores de Endesa. Asimismo, esta tecnología permite monitorizar el centro de transformación y recabar datos sobre cargas, niveles de tensión y otros parámetros técnicos que, una vez analizados, evidencian los comportamientos de consumos en la zona, unos de uso doméstico y otros consumos desmesurados que responden a una demanda continuada en el tiempo, 24 horas al día, todos los días de la semana, tipología de consumo de las plantaciones de marihuana indoor.
Esta nueva tecnología ha supuesto una inversión de unos 35.000 euros y es la segunda vez que se instala en los 3.200 centros de transformación repartidos por Sevilla, el primero se colocó en un centro de transformación de la barriada de Padre Pío. La Compañía tiene previsto seguir desplegando esta metodología por otros centros de transformación de las zonas más afectadas por sobrecarga de la red.
Este caso es un ejemplo paradigmático de las consecuencias del fraude eléctrico en la red de distribución, principalmente el destinado a las plantaciones de marihuana, y cómo la mejora y el refuerzo de la red son una solución de corto recorrido para poder garantizar el suministro. En este sentido, para encontrar una solución a este problema estructural es necesario la colaboración de todas las administraciones competentes, así como de las entidades sociales y de la sociedad en su conjunto para erradicar el cultivo ilegal de marihuana en los entornos urbanos.
Los técnicos de Endesa han estado trabajando desde primera hora de la mañana de ayer para reponer el suministro cuanto antes a los 200 clientes con contrato en vigor de la zona, quedando normalizado a las 4.30 horas de hoy, 19 de julio. Para ello, una vez que los efectivos de Bomberos han garantizado que la zona es segura para trabajar, han procedido a desinstalar todo el material interior del centro de transformación que ha quedado inutilizable. Para realizar estas tareas, los técnicos de Endesa han tenido que estar soportados por Policía Local, ya que han sufrido robos del material que estaban retirando y amenazas.
Una vez que han limpiado el interior del centro de transformación y han evaluado los daños, han solicitado el acopio del material nuevo y han comenzado con la instalación de toda la aparamenta eléctrica que lo compone (dos máquinas transformadoras, celdas de media tensión y cuadros de baja tensión). Asimismo, los técnicos han tenido que sanear en un perímetro de unos 4 metros alrededor del centro de transformación todo el cableado de baja tensión que sale de la instalación y que hace el reparto de energía hasta los puntos de consumo.
La renovación íntegra del centro de transformación ha supuesto una inversión de 60.000 euros.