Las consecuencias a las elecciones generales del pasado domingo continúan y las reacciones de distintas áreas políticas y empresariales no han tardado en llegar. Esta vez, Garamendi, el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), ha salido al paso y ha criticado que la formación del Gobierno vaya a depender de los partidos minoritarios. Por ello, ha instado a hablar con los dos partidos que han conformado el 73% de los escaños de estas elecciones generales (PP y PSOE) para así, conformar un Gobierno estable.
«Cuando ves y analizas estas elecciones y ves que el 73% de los escaños están en manos de PP y PSOE, realmente te sorprende que tengamos que estar pendientes de minorías que puedan influir en un momento tan decisivo y tan importante para nuestro país. Es el momento de que los grandes partidos se sienten a hablar y yo de nuevo lo reclamo y que nos den una estabilidad», ha señalado en declaraciones a Onda Cero.
El dirigente empresarial ha subrayado que a él la palabra «bloques le suena a bloqueo» y cree que España «debería estar en otra onda», por lo que ha vuelto a apelar «a la cohesión social y a la responsabilidad» y a que los dos grandes partidos se sienten a negociar un Gobierno estable para España.
Las declaraciones de Garamendi han tenido respuesta por parte de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo en funciones, Díaz, quien le ha reprochado al dirigente empresarial «que tenga un problema con la democracia y la institucionalidad».»Uno, en democracia, tiene que buscar los votos donde los tiene y es evidente que se ha hecho campaña con dos bloques: el PP, en el que a todas luces sabíamos que iba a gobernar con el señor Abascal, y el bloque del PSOE y Sumar (…). A veces, en las democracias, un grupo pequeño decide muchas cosas. Esto es la democracia», ha replicado Díaz en declaraciones a La Sexta.
En este sentido, Díaz ha instado a Garamendi a «respetar la democracia y los votos de cada formación política» y a «no minorar las voces democráticas». «Respetemos el artículo 99 de la Constitución española, que dice que no somos un país presidencialista y que necesitamos buscar los votos a través de negociaciones políticas», ha insistido la vicepresidenta segunda en funciones.