De primeras, los billetes baratos llegarán a dos nuevos destinos: Galicia y Murcia. Esta misma semana Renfe ha comenzado las pruebas de estas nuevas unidades por tierras gallegas. Lo hace de cara a poner en marcha a partir del primer trimestre de 2024 una nueva ruta entre Madrid, Zamora y Ourense, donde se deberá transbordar con otros trenes de media distancia. Serán cuatro trenes por sentido al día que, en un futuro, podrían extenderse hasta Santiago de Compostela, algo factible gracias a la tecnología de ancho variable con la que cuentan estas nuevas unidades.
Para la región murciana, donde hasta ahora tampoco se oferta el servicio de bajo coste y sólo llegan los AVE, los planes de Renfe pasan por conectar Madrid y Murcia con un tren diario de ida y otro de vuelta, también a partir del año que viene. Aquí competirá, si todo sigue su curso, con la operadora francesa Ouigo, que tiene intención de poner en marcha dos frecuencias diarias en ese mismo recorrido. Ambas ofertas multiplicarán las opciones de los murcianos de desplazarse hasta la capital por precios muy inferiores a los actuales.
Renfe también ha abierto la puerta a que sus Avlo lleguen a León y Asturias, aunque ha condicionado su fecha a la apertura de la variante de Pajares, prevista para el mes de noviembre. También a la demanda de los nuevos servicios AVE que se pongan en marcha, que también se harán con estos nuevos trenes, que permitirán duplicar las plazas ofrecidas hasta ahora.
Además, el aumento esperado en la flota de trenes de alta velocidad permitirá elevar la oferta de servicios a algunos de los destinos donde ya llega Avlo. Es el caso, por ejemplo, de la rutas que unen Barcelona y Valencia con Madrid, donde la competencia entre Renfe, Ouigo e Iryo ha rebajado de forma sustancial los precios de los billetes.
También se incrementarán las frecuencias del Avlo Madrid-Valencia, que pasarán de las seis actuales (tres por sentido) a diez diarias (cinco por sentido). Esto incrementará los asientos de bajo coste en 24.000 semanales, algo en lo que no tiene que ver sólo el número de trenes, sino también su capacidad: Renfe ha adelantado que se cambiarán los modelos que hacen esta ruta, que pasarán de los 356 asientos actuales a 440. Esta misma fórmula se replicará para Málaga, que pasará de una a tres frecuencias diarias por sentido con Madrid., ofertando 16.000 plazas adicionales cada semana.