En los seis primeros meses del año, el crédito al consumo ha seguido una tendencia al alza, pasando de los 95.480 millones de euros a los 97.061 millones de euros en este tipo de préstamos, lo que supone una subida acumulada de 1.581 millones de euros. En el año el incremento ha sido del del 1,6% y se sitúa en el nivel más alto de los últimos años ya que los hogares optan por tirar de préstamos antes que recortar gastos ante la pérdida de poder adquisitivo. A ello ha contribuido a que los tipos de interés aplicados en los préstamos al consumo sigan contenidos frente al incremento del euríbor. Así y para el mes de mayo de este año, el tipo TEDR de las nuevas operaciones, que excluye los gastos asociados, fue del 7,96% frente al 6,64% de hace un año, mientras que el de las hipotecas ha pasado del 1,65% de mayo de 2022 al 3,71%. Asimismo, este tipo de préstamos lleva ya doce meses subiendo, registrando unas pequeñas caídas en agosto de 2022 y febrero de este año.
Por su parte, las familias siguen reduciendo el volumen del crédito destinado a la compra de vivienda. En ese sentido, la caída ha sido del 1,4% interanual y es que las familias, y ante la subida del euríbor que cerró en junio en tasa mensual en el 4%, han optado por amortizar anticipadamente sus créditos inmobiliarios. Así, el crédito para vivienda cerró en junio en los 503.364 millones de euros, siendo un volumen total del crédito de los más bajos en los últimos años.
En cuanto a la financiación a empresas, el descenso fue del 2,5 %, hasta los 923.447 millones, según los datos publicados este martes por el Banco de España. Sin embargo, en comparación con el mes anterior, el crédito a las empresas prácticamente se estancó, con una reducción del saldo del 0,04 %, mientras que la financiación a las familias creció un 1,44 %.