Según los datos publicados por el Banco de España el saldo de préstamos dudosos ha caída en apenas un mes en torno a los 655 millones de euros, quedándose en 42.173 millones, su cifra más baja desde julio del año 2008, cuando rondaba los 41.050 millones.
Esta reducción permitió que el peso sobre el total de la cartera crediticia se haya recortado en nueve puntos básicos, desde el 3,59% de mayo hasta el 3,5% al que ha cerrado el primer semestre del año. Se trata de una ratio que no se veía tan baja desde que en diciembre de 2008 marcó el 3,37%. En los años comprendidos entre 2004 y 2007 este porcentaje se mantuvo en términos generales por debajo del 1%, para luego ir subiendo paulatinamente hasta que a finales de 2013 superó el 13,6%. Luego emprendió una senda descendente que de momento continúa.
En términos interanuales, la tasa de morosidad de los créditos concedidos en España ha descendido en 38 puntos básicos, desde el 3,88% de junio de 2022. A este retroceso de la mora contribuyó también el incremento de la cartera crediticia en su conjunto, que cerró la primera mitad del año por encima de los 1.205 billones de euros, frente a los casi 1.192 billones de mayo.
Los datos desglosados por tipo de entidad reflejan que la ratio de dudosos del conjunto de entidades de depósito (bancos, cajas y cooperativas) cerró junio en el 3,39%, por debajo del 3,39% del mes anterior y del 3,80% de un año antes. De su lado, la ratio de mora de los establecimientos financieros de crédito bajó al 6,33% en el sexto mes del año, inferior al 6,58% de mayo y por debajo del 6,22% de un año antes. Según los datos del Banco de España, las provisiones del total de entidades de crédito se redujeron a 30.529 millones de euros en junio, lo que supone una reducción del 1,10% con respecto al mes anterior y un descenso del 8,48% con respecto a junio de 2022.