Por componentes, los alimentos, el alcohol y el tabaco registran la tasa anual más alta en agosto (9,8%, frente al 10,8% de julio), por delante de los servicios (5,5%, frente al 5,6%), los bienes industriales no energéticos (4,8%, frente al 5) y la energía (-3,3%, frente al -6,1% de julio).
Por países, España se coloca, junto a Bélgica, como los que registran el menor encarecimiento de los precios de toda la eurozona, ambos con una tasa del 2,4%. Por el contrario, Eslovaquia (9,6%), por delante de Croacia (8,5%) y de Austria (7,6%) sufren las las subidas más intensas. Por su parte, la tasa subyacente se moderó hasta el 5,3% desde el 5,5%, en línea con lo previsto, colocándose en su nivel más bajo desde mayo. Excluyendo únicamente del cálculo el impacto de la energía, la tasa desciende hasta el 6,3%, desde el 6,7% del mes previo.
Según las últimas previsiones del organismo europeo, la inflación promediará el 4,7% en el tercer trimestre. Para que esto suceda, la inflación en septiembre tendría que caer por debajo del 4%. En concreto, estiman que la inflación general de la zona euro reanudará su caída en los próximos meses, alcanzando el 4,5% en septiembre.