La confirmación de la empresa a los sindicatos se realizó durante la séptima reunión de negociación del nuevo convenio colectivo, llevada a cabo en la ciudad olívica en la mañana de este jueves. “En un contexto de descarbonización y de regulación de emisiones de la Unión Europa, la adjudicación de la siguiente arquitectura de vehículos eléctricos se convierte en un objetivo imprescindible para el mantenimiento de la actividad industrial del centro más allá de 2027″, ha subrayado la compañía. “En el supuesto de que esta nueva arquitectura de vehículo no sea asignada a la planta, cualquiera de las partes podrá solicitar automáticamente la reapertura de las negociaciones del convenio colectivo 2024-2027, debiendo ser éste reconsiderado en su conjunto”, ha sentenciado el fabricante.
La llegada de la plataforma STLA Small asegurará la carga de trabajo tanto en la factoría viguesa como en la zaragozana durante la próxima década y media. Por esta plataforma también ha pujado Francia, que pidió a Stellantis producir allí vehículos pequeños y más económicos, ya que son los que más carga de trabajo dan, pero la compañía ha desestimado esa posibilidad por una cuestión de costes.
Dicha plataforma estará muy atada a lo que suceda con la mencionada fábrica de baterías, un proyecto que se encuentra en el aire hasta que Stellantis se asegure más fondos públicos de los recibidos en el Perte VEC II. Para ello, la compañía estudia presentarse al Perte III que saldrá el año que viene, además de otros fondos públicos que pueda obtener. El grupo mantiene un fluido contacto con la autonomía aragonesa, para la que el proyecto es “fundamental”, según ha reconocido este jueves el presidente de Aragón, Azcón.