En un discurso telemático para clausurar el XXVIII Encuentro de Economía en S’Agaró (Girona), ha dicho que la economía española “está demostrando una gran fortaleza”, como el país que más crece y uno de los que tiene menos inflación entre las grandes economías europeas. Atribuye esa fortaleza a los fondos Next Generation y la agenda de política económica española, que ha resumido en tres principios: responsabilidad fiscal (“que da tranquilidad a los mercados”), justicia social y reformas estructurales para modernizar la economía. Pero ha constatado una “alta incertidumbre” del contexto geopolítico y una ralentización de la economía europea por la subida de los tipos de interés, y en pleno cambio tecnológico.
Por eso, ve “más importante que nunca encontrar terreno común” para asegurar estabilidad política y financiera, crecimiento sostenible, y cohesión y paz social.
Ve necesario que los líderes políticos y los empresariales transmitan confianza a la gente, a las empresas y a los inversores, lo cual implica cinco cualidades: diálogo, flexibilidad para adaptarse, atraer talento, ambición y visión, y responsabilidad social. Calviño ha asegurado que su gobierno se ha comprometido con esos valores desde el principio y lo seguirá haciendo, y ha pedido que España se sienta orgullosa de sí misma, sin caer en la autocomplacencia.