«El PNV se va a implicar para que las cosas que se hagan sean razonables para todas las partes», ha afirmado al ser preguntado por el rechazo de Repsol a este impuesto y su advertencia sobre llevarse inversiones del País Vasco y del resto de España a otros países si el Gobierno lo prorroga tras su vencimiento a final de este año. «Lo que está claro es que tal y como está ese gravamen es mercancía averiada», ha afirmado Ortuzar que tiene votos decisivos para medidas legislativas de prórroga.
Por su parte, la vicepresidenta Ribera, parece acatar el informe de la Comisión Europea sobre los beneficios de las petroleras y gasistas advirtiendo de que ya no es la que motivó que se permitieran en la UE impuestos especiales por ganancias extraordinarias.
En declaraciones a Colpisa, Ribera afirma que se va a pensar cómo mantener el gravamen: «Buscamos un impuesto energético razonable porque la situación es otra», lo cual responde al compromiso entre Poie y Sumafr para investir a Sanchez presidente según los cuales se revisarían “los gravámenes sobre la banca y las empresas energéticas con el objetivo de readaptarlos y mantenerlos una vez que expire su periodo de aplicación actual,.para que ambos sectores sigan contribuyendo a la justicia fiscal y al sostenimiento del Estado de bienestar».