«Hay señales de que los indicadores de sentimiento están tocando fondo, pero las perspectivas económicas a corto plazo siguen siendo débiles, en línea con nuestras previsiones», ha explicado Schnabel en un foro de preguntas y respuestas, en el cual ha añadido que la ralentización de la economía es parte de la transmisión de la política monetaria. Al mismo tiempo, la alemana ha asegurado que «las condiciones financieras se han relajado más de lo esperado, mientras que los precios energéticos se han debilitado».
En cuanto a la inflación, Schnabel ha sostenido que esta se ha moderado, pero que las presiones subyacentes continúan siendo «elevadas». A este respecto, la integrante del instituto emisor ha recordado que la tasa de referencia deberá seguir siendo lo «suficientemente restrictiva por cuanto tiempo sea necesario» para doblegar el encarecimiento del coste de la vida y limitarlo al 2%.