La primera operación se centra en la compra de un total de 26 cabezas motrices y la transformación de 156 coches en 13 trenes de alta velocidad de la serie 107, dotados de ancho variable, con un coste total estimado del proyecto de 260 millones, de los que 125 millones serán financiados por el BEI. El segundo préstamo, por un importe de 100 millones de euros, está destinado a los proyectos de la filial de Mercancías. Se empleará para la adquisición de 24 locomotoras eléctricas, la adquisición de vagones para servicios intermodales y la implementación del Sistema Europeo de Gestión del Tráfico Ferroviario (ERTMS) en algunas locomotoras actuales, así como medidas para reducir el ruido, con un coste de 212 millones de euros.
El BEI financia desde hace años parte de la compra de material rodante de Renfe en el marco de su prioridad de política pública, ‘Ciudades y regiones sostenibles’, que intenta promover las inversiones a largo plazo en el transporte sostenible y generar beneficios medioambientales, contribuyendo a la reducción de la congestión en el tráfico rodado, la polución atmosférica y las emisiones de gases de efecto invernadero.
Entre las inversiones de Renfe más importantes financiadas por el BEI destacan la compra de trenes de alta velocidad a Talgo y Siemens, series 103, 112, 106 y 130, y la compra de trenes de Cercanías y Media Distancia a CAF y Alstom, entre otros.