Así lo ha expresado este miércoles durante su intervención en un acto organizado por ‘El Confidencial’ y Pimco. En el caso de empresas, ha señalado que este porcentaje alcanzará al 58%. «Por tanto, en este contexto es muy probable que en 2024 no se repitan los crecimientos de márgenes observados en 2023». «Podemos concluir que tanto la reducción del volumen de crédito como de los márgenes unitarios afectarán claramente a los márgenes bancarios en 2024. Como nota positiva, la potencial reducción de costes financieros para empresas y familias favorece el mantenimiento de los niveles de calidad crediticia».
En cuanto a 2023, Delgado ha afirmado que a lo largo del año se ha producido una reducción del stock de crédito del 3,7%. Aunque la caída del crédito en familias no ha sido tan pronunciada como en las empresas, la subgobernadora del Banco de España sí que ha destacado la reducción del stock de hipotecas, que cae un 2,7% en 2023, «en un contexto de atonía en el mercado inmobiliario con caídas significativas en el número de transacciones de viviendas, que descienden casi un 16% en un año, y con subidas moderadas en los precios, un 4,5% interanual».
«Sin duda, el endurecimiento de la política monetaria ha tenido impacto en este segmento», ha apuntado. Como ha explicado, un hecho destacado en este segmento de hipotecas es que durante 2022 y gran parte de 2023 se produjo un ritmo muy dinámico de amortizaciones, que llegó a alcanzar en marzo un 34,8% más que la media observada entre 2019 y 2023.
«En un contexto de incremento de tipos de interés, las familias han destinado parte de sus ahorros para amortizar parcialmente préstamos hipotecarios, amortiguando de este modo el impacto de la subida de tipos. No obstante, este ritmo acelerado de amortizaciones ya se ha ralentizado significativamente y los niveles actuales ya se encuentran cercanos a esta media».
Por su parte, la nueva producción de hipotecas es un 4,4% inferior a la media del periodo mencionado y se observa una clara tendencia decreciente desde los máximos alcanzados en junio de 2022. «Como resultado, el stock de hipotecas cae». Una reducción que viene explicada principalmente por el lado de la demanda, dado que las condiciones de concesión no han variado significativamente.