Esta cifra se corresponde con una caída interanual del 10,4%, gracias en gran parte a las pérdidas millonarias en las que han incurrido durante este ejercicio la inmobiliaria Colonial y Telefónica.
A pesar de que, teniendo en cuenta el conjunto de las compañías, el resultado fuese menor que el año anterior, algunas de las cotizadas marcaron máximos en cuanto a ganancias en 2023. Entre las que lograron batir récords en sus resultados se encuentran la mayoría de los bancos (con la excepción de Unicaja), impulsados por el aumento de ingresos por las subidas de tipos de interés.
De hecho, el Banco Santander fue la firma del Ibex que registró el mejor resultado en 2023, con un beneficio de casi 11.100 millones, un 15,3% más que el año anterior. Le siguieron BBVA, con 8.000 millones (casi un 25% más) y CaixaBank, con ganancias que superaron los 4.800 millones (un 54% más que en 2022).
Después de los tres grandes bancos quedó Iberdrola, con un beneficio cercano a los 4.800 millones, casi un 11% más, y Repsol, con 3.168 millones, en este caso, un 25,5% menos. En las cinco siguientes posiciones están IAG, cabecera del grupo al que pertenece Iberia, que sextuplicó su beneficio, hasta 2.655 millones; Naturgy, que ganó 1.986 millones, un 20,4 % más; AENA, casi 1.631 millones, un 81 % más; Sabadell, con un récord de 1.332 millones, un 55 % más, y Amadeus, 1.052 millones, un 68,3 % más.
De esta forma, y aunque exista una gran diferencia entre los resultados de cada una de ellas, los beneficios de una decena de empresas del IBEX 35 superaron claramente la cota de los 1.000 millones de euros de beneficio en 2023.
Por debajo de esa cifra pero por encima de los 500 millones hay 8 compañías: ArcelorMittal, 852 millones, un 90,10% menos; Bankinter, 845 millones, un 51% más; ACS, 780 millones, un 16,7% menos; Endesa, 742 millones, un 70,8% menos; Mapfre, 692 millones, un 7,7% más; Redeia, 690 millones, un 3,75% más; Acciona, 541 millones, un 22,7% más, y Acciona Energía, 524 millones, un 31% menos.
Con un resultado por debajo de los 500 millones pero superior a los 200 millones figuran 5 empresas: Ferrovial, 460 millones, un 147% más; Enagás, 342,5 millones, un 8,8% menos; Unicaja Banco, 267 millones, un 4% menos; Acerinox, 228 millones, un 59% menos, e Indra, 206 millones, un 19,8% más.
En la horquilla entre 100 y 200 millones de beneficio se cuentan otras 5 compañías, que son Rovi, 170,3 millones, un 15,3% menos; Sacyr, 153 millones, un 39% más; Meliá, 130 millones, un 8% más; Fluidra, 114 millones, un 29 menos, y Solaria, 107,5 millones, un 19,4% más. Logista, con 73 millones de euros, un 21,9% más, figuraría a continuación, pero sus datos no son comparables ya que se trata únicamente de su primer trimestre fiscal, ya que contablemente su año arranca en octubre.
A la cola del IBEX 35, con los menores resultados, está Grifols, con un beneficio de 59 millones en 2023, un 71,50% menos, unas cuentas que fueron publicadas sin auditar, aunque la compañía aseguró que la firma KPMG emitirá esta semana su informe «sin salvedades». Grifols lleva desde principios de 2024 en el foco de la firma bajista Gotham, que le acusó de ocultar deuda a través de sociedad vinculadas y dijo que sus acciones deberían valer cero.
En esta ocasión, hasta cuatro compañías del IBEX 35 anunciaron pérdidas en 2023, que restaron casi 2.300 millones de euros a los resultados del conjunto de empresas de este índice bursátil, de las que más de 1.000 millones correspondieron a Colonial. La socimi catalana perdió 1.019 millones el pasado año, frente a los 8 millones que ganó en 2022, por la depreciación del valor de sus activos, ya que el resultado operativo siguió siendo positivo.
Pero no fue la única firma en números rojos ya que Telefónica se anotó unas pérdidas contables de 892 millones en 2023 por la provisión el plan de reestructuración de empleo en España y por el deterioro del valor de su negocio en el Reino Unido.
Cellnex también se anotó pérdidas, en este caso de 297 millones, igual que el año anterior, a pesar de que sus ingresos mejoraron, y completa la lista la socimi Merlin Properties, que reportó unos números rojos de 83 millones por la depreciación del valor de sus activos, en línea con lo que le sucedió a Colonial.