El informe mensual de pisos.com reveló que las regiones más caras para vivir de alquiler en febrero de 2024 fueron Baleares (17,15 €/m²), Madrid (15,93 €/m²) y Cataluña (12,85 €/m²), mientras que las rentas más económicas estuvieron en La Rioja (4,33 €/m²), Castilla y León (4,92 €/m²) y Extremadura (5,17 €/m²). En el último mes, el incremento más llamativo tuvo lugar en Canarias (2,97%). El mayor ajuste se produjo en Navarra (-3,04%). Respecto al año pasado, Canarias (23,78%) fue la que más subió y La Rioja (-18,82%) la que más se rebajó.
En la clasificación de provincias por renta, en febrero de 2024 la primera posición fue para Baleares, con 17,15 euros por metro cuadrado. Le siguieron Madrid (15,93 €/m²) y Barcelona (15,68 €/m²). En el lado opuesto, Ourense cerró la clasificación con 3,25 euros por metro cuadrado. Otras provincias económicas fueron Ávila (3,40 €/m²) y Cuenca (3,45 €/m²). La provincia que más encareció sus alquileres en el último mes fue Málaga (3,16%), mientras que la que más los abarató fue Castellón (-3,05%). De un año a otro, la mayor subida registrada fue la de Las Palmas (24,59%). La renta que más se ajustó fue la de Ourense (-20,54%).
En cuanto a capitales de provincia, Barcelona fue la más cara para los inquilinos con un precio medio de 25,38 euros por metro cuadrado. Le siguieron Madrid (21,41 €/m²) y Donostia-San Sebastián (18,39 €/m²). Por el contrario, Jaén fue la más barata con 6,44 euros por metro cuadrado. Otras capitales de provincia económicas Ourense (6,73 €/m²) y Ciudad Real (6,91 €/m²). Huesca (3,33%) protagonizó las subidas mensuales, mientras que Cuenca (-2,97%) fue la capital que más se devaluó en este periodo. Frente a febrero de 2023, Valencia (26,87%) lideró los incrementos. El recorte más llamativo lo arrojó Lugo (-5,29%).
En este contexto, y con la natural tendencia hacia una disponibilidad reducida de inmuebles, los precios de venta suben. Al poner un piso en alquiler, no solo se busca pagar la hipoteca, sino extraer algo de rentabilidad, y si se ha comprado caro y lo que se obtiene no compensa, la oferta se retira del alquiler residencial, y vuelta a empezar”, describe Font, director de estudios de pisos.com. Esta retirada de oferta en alquiler ahora cuenta con nuevo factor de presión: el índice de precios de referencia elaborado por el Gobierno. “La medida no ha empezado con buen pie, pues solo una comunidad autónoma va a aplicarla, y sin estar del todo de acuerdo con la metodología que tiene detrás”. Además, el experto critica la poca definición de este índice respecto, por ejemplo, a su régimen sancionador. “No solo van a aumentar las fugas de inmuebles que ahora estaban alquilados, sino que se paralizará el volcado de nuevas viviendas en alquiler”.
“Estrechar el cerco sobre los propietarios perjudica seriamente al mercado del alquiler”, señala el portavoz del portal inmobiliario, añadiendo que “si no se toman decisiones estratégicas que aumenten el parque edificatorio público más que penalizar el ya existente, nos vamos a encontrar con un serio problema de accesibilidad”. Font insiste en que “una normativa que no va más allá del precio, sin tener en cuenta nada más, solo añadirá más descontento y rechazo”.