Esta es una de las conclusiones del informe del mercado inmobiliario elaborado por Engel & Völkers que muestra que entre el 15% y el 30% de las viviendas vendidas por la compañía en estas zonas durante el pasado año superó el millón de euros.
En Madrid, donde el precio medio al que se cerraron las operaciones gestionadas en 2023 se situó en 932.000 euros, el ticket medio superó con creces el millón de euros en distritos como Salamanca y Chamartín, así como en municipios como Boadilla del Monte. En Barcelona, destaca el caso de Pedralbes, donde cerca del 30% de las operaciones de venta sobrepasaron los dos millones de euros, mientras que, en otras ciudades españolas como Benidorm, dos de cada tres viviendas que vendió la inmobiliaria en Finestrat superó esta cota.
La cartera actual de la inmobiliaria muestra que el 55% de las propiedades en venta supera esta barrera en la capital, mientras que en Barcelona este porcentaje se aproxima al 40%, en Valencia supone ya el 15% y en Sevilla asciende al 25%.
En el mercado de la compraventa de viviendas hay tres factores determinantes: los tipos de interés, la predisposición de los bancos para dar crédito y el mercado laboral. Todos ellos son factores que marcan la evolución del sector inmobiliario, si bien para medir un comportamiento por zonas la última es la que diferencia unas ciudades de otras. Los dos primeros, por su parte, marcarán en 2024 un panorama más a favor del sector inmobiliario de lo que lo han hecho en 2023, un ejercicio marcado por las subidas de los tipos de interés para controlar la inflación y los conflictos geopolíticos.
El profesor de economía y director del Máster inmobiliario de la Universidad de Barcelona, Bernardos, ha señalado que “la primavera de 2024 marcará un punto de inflexión al calor de la recuperación de la economía, unos tipos de interés más bajos y un sector financiero más flexible en la concesión del crédito”. “La financiación será la clave para que las compraventas de vivienda usada marquen un nuevo récord, superando las cifras de 2022”, apostilla Bernardos al prever una subida del 15% en las transacciones y un alza entre el 5-7% en los precios para este año.
De todas las propiedades vendidas en España por Engel & Völkers en 2023, más de la mitad se compraron sin recurrir a financiación ajena en las principales capitales españolas. En Madrid, el número de clientes de la inmobiliaria que pide hipoteca para afrontar la compra de la vivienda continuó a la baja en un contexto de subidas de los tipos de interés. Si en 2021, el 61% de las compraventas cerradas por Engel & Völkers requirieron de hipoteca, este porcentaje ha ido bajando paulatinamente hasta alcanzar el 47% en 2023. Un vuelco que ha situado como mayoritario el pago al contado, hasta alcanzar el 53% de las operaciones. Cifras similares se han registrado en Barcelona. Incluso en la costa y el Pirineo catalán suben el número de clientes que ha comprado una vivienda con fondos propios. En Valencia únicamente el 35% de los compradores ha recurrido a la financiación, frente al 65% de recursos propios, en línea con otras ciudades de la comunidad. Destaca Costa Blanca, en la que municipios como Altea, Calpe, Moraira, Benissa y Benidorm el 95% de los clientes ha adquirido una propiedad con fondos propios, un porcentaje de financiación testimonial que también está presente en Marbella.