En términos interanuales, la mayoría de los grupos analizados presentan pequeños repuntes. El impulso de los grupos ‘Capitales y Grandes Ciudades’ (2,6 % interanual) y ‘Áreas Metropolitanas’ (2,9 %) ha sido modesto, mientras que ‘Islas’ (+8,2 %) y ‘Costa Mediterránea’ (+6,5 %) muestran cierta aceleración. “La desaceleración más pausada en las zonas turísticas es consistente con un perfil de comprador de segunda residencia con mayor poder adquisitivo y con un perfil inversor, que sostienen el dinamismo de la demanda en estas zonas”, apunta Arias, directora del Servicio de Estudios de Tinsa. “Por su parte, en los polos de empleo se refleja una mayor dificultad de acceso a la vivienda tras la contracción del crédito hipotecario y la pérdida de poder adquisitivo de los hogares acumulada desde la pandemia. La escasez de oferta contribuye a sostener los precios a pesar de que la demanda se contraiga”.
• Se confirma la estabilización en polos de empleo, áreas metropolitanas y zonas de interior, mientras que las zonas con componente turístico reflejan un nuevo impulso.
• La variación interanual se ha situado en marzo entre el 2,6% y el 8,2%, destacando ‘Islas’ y la ‘Costa mediterránea’ con los mayores crecimientos en el último año.
• Solo ‘Resto de municipios’ presenta una reducción en el precio de la vivienda respecto al mes anterior: -0,3 %.
• El Índice General se encuentra un 18,24 % por debajo del máximo de diciembre de 2007.
La variación mensual de los diferentes grupos se ha situado entre el -0,3 % y +0,9 %, siendo las localidades más pequeñas del interior peninsular, agrupadas en ‘Resto de municipios’, el único grupo que registró una leve contracción en el entorno de la estabilización (-0,3 %). Destaca el impulso mensual de ‘Territorio Insular’ (+0,9 %), que se acelera por cuarto mes consecutivo, mientras que ‘Costa Mediterránea’ (+0,4 %) sostiene el nivel de crecimiento que ya registró el mes anterior. “La proporción de compraventas de extranjeros en 2023 alcanzó máximos similares a los de los años 2015-2016. La corrección de los precios residenciales tras el estallido de la burbuja de 2008 fue más intensa en España que en otros países europeos, y su recuperación en la última década ha sido menor. Esto ha motivado que el residencial español haya vuelto a resultar competitivo frente a otros países”, apunta Arias.
Dejando a un lado las zonas con mayor componente turístico, las ‘Áreas Metropolitanas’ (+0,4 % mensual) registraron un impulso en marzo que compensa los retrocesos de los dos meses precedentes, confirmando la estabilización. En las ‘Capitales y Grandes Ciudades’ (+0,1 %) también se mantiene la estabilización con un crecimiento mensual casi nulo. En este contexto de estabilización progresiva, el Servicio de Estudios de Tinsa destaca una serie de factores que están favorecido el mantenimiento de la solvencia de la demanda. “En los primeros meses del año se han mantenido la moderación de la inflación subyacente, la resistencia del empleo y la recuperación del poder adquisitivo de los hogares. Además, las subidas de tipos de interés parecen haber tocado techo. Todo ello contribuye a sostener la solvencia y confianza de la demanda”, destaca Cristina Arias.
Tras el cierre definitivo de los datos de marzo, la variación interanual del primer trimestre del año se mantiene sin variación en el 3,3 % anunciado provisionalmente el pasado 1 de abril. La vivienda nueva y usada en España se ha revalorizado un 39 % desde el mínimo registrado tras la crisis inmobiliaria y es actualmente un 18,2 % más barata que en diciembre de 2007, cuando alcanzó su máximo en el ciclo expansivo anterior.
Los mercados donde el índice de precios se aproxima más a las cotas alcanzadas en 2007/2008 son los territorios insulares, donde la caída acumulada es de solo un 1,7 % y las ‘Capitales y grandes ciudades’, donde la diferencia es de un 14,3 %. En el extremo contrario, los mercados de interior de ‘Resto de municipios’ se equiparán en el grado de caída respecto a su máximo con ‘Costa mediterránea’: un 27,4%.