Esto hace que la huella total de la teleco española, aún bajo el paraguas de su matriz británica mientras el Gobierno autoriza la adquisición de la división por parte de Zegona, alcance los 29,7 millones incluyendo todos los acuerdos de compartición y todas las tecnologías.
Esta ampliación será «especialmente relevante» en 94 de esos municipios (91.000 hogares), dado que hasta ahora no existía cobertura con Vodafone. El mayor esfuerzo de ampliación ha tenido lugar en Andalucía, que concentra más de un 13% de esas nuevas unidades inmobiliarias. Por detrás se sitúan Aragón, con algo más del 10%, y más abajo Castilla La Mancha, Castilla y León y Cataluña.
Vodafone trata de «asegurar el acceso a una conexión en las poblaciones rurales» en España. Hay que tener en cuenta que, pese a que el grueso de los despliegues y los acuerdos de compartición de redes se formalizaron principalmente en la década pasada y en el arranque de esta, sigue habiendo inversión para ir ampliando la presencia, especialmente en estos territorios.
La propia Zegona aseguraba en su folleto presentado ante el regulador británico en a cierre de marzo de 2023 que la red fija con hasta 1 ‘gigabit’ alcanzaba 28,9 millones de unidades. Hoy, la operadora habla de 29,7 millones. De esos 28,9 millones, aproximadamente unos 10,7 millones eran con su propia red (6,8 millones a través de su red HFC y 3,2 millones con fibra hasta el hogar). El resto está cubierta con acuerdos mayoristas con el resto de operadores.