Pero de ellos, solo 1 de cada 3 tiene una jornada completa. El resto del empleo que se crea es parcial o discontinuo. Y dentro de esta contratación precaria, las mujeres se llevan la peor parte. Como punto positivo, por primera vez hay en España más de 10 millones de afiliadas a la Seguridad Social. Sin embargo, en las estadísticas de contratación ganan los hombres. Pero las mujeres los superan en contratación temporal. Así, el 57,75 % de los contratos indefinidos los firman hombres; pero el 50,21 % de los temporales, las mujeres.
“Estos claroscuros del empleo siguen presentando puestos de trabajo volátiles. Por ejemplo, se firmaron 1,34 millones de contratos, 576.000 de ellos indefinidos. El paro baja en menos de 59.000 personas. ¿Realmente son indefinidos esos contratos? 10 contratos indefinidos al mes para reducir el paro en 1 persona, y solo hablamos del dato de indefinidos. Un país en el que se firman más de 1 millón de contratos cada mes no puede tener aún este nivel de paro: solo se explica por la destrucción inmediata de la mayor parte de los empleos”, denuncia Pérez, secretario general de USO.
Lo mas curioso es que de los 220.000 nuevos empleos medios, casi 200.000 se han destruido en la última semana: 180.551, el último día del mes.
En concreto y según los datos oficiales, los últimos 31 días se formalizaron más de 1,3 millones de contratos de los que 576.080 eran indefinidos y en ambos casos son menos de los firmados en el mismo periodo del año anterior (-5,13% y -7,81% respectivamente). Cerca del 40% estaban vinculados a puestos de trabajo a tiempo completo, otro tanto eran fijos discontinuos -que alteran periodos de actividad e inactividad en función de las necesidades del empleador- y un 22% restante eran contratos a tiempo parcial. En cambio, se suscribieron un total de 763.573 acuerdos indefinidos de los que el 70% eran contrataciones para desarrollar una jornada completa. Según los datos compartidos por el Ministerio de Trabajo este martes, a día de hoy sigue habiendo 1.300 contratos por obra o servicio, la figura que estaba más extendida antes de la introducción de la reforma y que ahora tiene un papel totalmente residual. Todos ellos fueron firmados antes de 2021, puesto que el real decreto-ley 32/2021 acabó con ellos. Los contratos por circunstancias de la producción si sobrevivieron al cambio normativo, esta fórmula se conservó para responder a picos de actividad inesperados o previsibles pero muy limitados en el tiempo, por lo que en mayo había más de 23.100 trabajadores contratados bajo este paraguas. Además, los registros del Servicio Público de Empleo reflejan que en el último mes hubo 33.217 conversiones de contratos temporales en fijos, de los que la mayoría se concentran en el sector de los servicios (24.110), seguidos de la industria (5.174), la construcción (2.799) y por último, la agricultura (1.134). El ámbito de los servicios concentra más de la mitad de las firmas de acuerdos indefinidos del mes de mayo (387.286 sin tener en cuenta las conversiones), mientras que la agricultura se sitúa en segunda posición, con más de 74.000 nuevas contrataciones a las puertas del verano.