Este decrecimiento sigue la tendencia que comenzó en el primer trimestre por el ramo de vida. Aquí, el seguro cae un 14,1% hasta junio debido al excepcional comportamiento del año anterior por las subidas de los tipos de interés, que provocó que estos productos se volvieran más atractivos al ofrecer más rentabilidad.
No obstante, aunque las primas imputadas de este ramo hayan caído unos 3.000 millones, las provisiones técnicas de las aseguradoras siguen aumentando a un ritmo de casi el 4% hasta situarse en 207.964 millones en el semestre.
La inflación también ha traído un incremento de las primas en no vida. Aquí, el seguro crece a un ritmo sostenido del 7,8%, en especial gracias al ramo de autos, que factura 6.672 millones de euros en el semestre, un 9% más.
Este negocio es el que más crece, seguido del ramo de salud, que ya era el segundo en cuanto a facturación desde el año pasado, adelantando a multirriesgos. El ramo llega a los 6.091 millones y aumenta un 7,4%. Por su parte, multirriesgos supera los 5.000 millones de ingresos y crece incluso más que salud (8,4%), en especial por el seguro de hogar, que supera el 9,5% de incremento.
Por último, el resto de seguros de no vida, compuesto principalmente por líneas de aseguramiento empresarial, creció un 6,28% de un año para otro y aportó 6.152 millones de euros.