La compañía postal acumula una década de resultados financieros negativos por más de 940 millones de euros, situación que había dejado a la empresa en una situación próxima a la quiebra técnica, según los representantes de los trabajadores. El Gobierno espera revertir este contexto con una aportación estatal extraordinaria que se llevará a cabo entre 2025 y 2028, inicialmente.
El nuevo ‘Acuerdo Marco Estratégico 2024-2028’ de Correos tiene como objetivo la «recuperación, transformación y reposicionamiento estratégico» de la sociedad estatal mediante la puesta en marcha de un nuevo plan estratégico que pondrá el foco en los negocios más rentables. También se implantará un nuevo marco laboral destinado a actualizar las condiciones laborales de los más de 50.000 trabajadores de la empresa.
El plan para rescatar Correos de la quiebra contempla mantener la empresa pública como operador designado del Servicio Postal Universal para todo el territorio español a partir de 2025, así como un aumento de la financiación asociada a este servicio que garantice sus costes reales y permita adaptarlo a un nuevo modelo digital. A este fin, el Gobierno destinará unos 1.050 millones de euros.
Además, se llevará a cabo un reposicionamiento de su actividad mediante el diseño de una nueva hoja de ruta que incluya la prestación de los llamados Servicios de Interés Económico General (SIEG) que son de interés público para la ciudadanía, tales como trámites administrativos o servicios financieros básicos, en línea con lo que ya realizan otros operadores postales europeos.
Este nuevo plan Estratégico contempla centrar las operaciones en servicios postales —donde Correos ha perdido un tercio de su facturación y se ha reducido su cuota de mercado del 97% al 85%— y paquetería, donde compite con el resto de actores privados del sector y su trozo de tarta es cada vez más pequeño: del 37% al 21% del negocio en España, pese a que el mercado se ha duplicado. La ambición de la cúpula pasaría por lograr revertir esta tendencia y que la paquetería compense la caída del servicio postal.
Además, la dirección de Correos apostará por la diversificación de las ramas de negocio hacia áreas rentables como la logística; la transformación tecnológica y digital de la empresa de la mano de un nuevo plan de inversiones o la internacionalización de su actividad. Para todas estas cuestiones, el Acuerdo contempla inversiones por valor aproximado de 1.350 millones de euros.
Por último, Moncloa destinará unos 1.500 millones a un nuevo marco laboral para Correos que incluirá el llamado ‘Plan de Personas’ para garantizar el relevo generacional en la compañía, que previsiblemente irá acompañado de prejubilaciones del personal de edades más avanzadas. Las medidas también incluirán acciones sobre el personal, que sufre alarmantes cifras de un absentismo al alza que ya alcanza al 10% de la plantilla, con el objetivo de mejorar la eficiencia. Asimismo, se abre la puerta a negociar un nuevo convenio colectivo que actualice las condiciones laborales y salariales, además de incorporar la jornada de 35 horas semanales.
Desde CCOO valoran «muy positivamente» el acuerdo, después de que el nuevo presidente de la compañía, Saura, acordase revertir el bloqueo sobre el diálogo social que impuso por su predecesor, Serrano, y pactase con los sindicatos el diseño de este acuerdo. Desde la organización aseguran que permitirá «salvar el Correo Público y situarlo en un horizonte de crecimiento y estabilidad después del abandono de los últimos años».
Moncloa, que colocó a Saura al frente de Correos tras reflotar el negocio de Paradores, acepta así las tesis de uno de sus grandes ‘fontaneros’, que reclamó la puesta en marcha de un «plan de choque» para abordar la crítica situación financiera y organizativa del ente público tras varios años en los que el Gobierno dejó a la deriva el negocio postal público.
Este acuerdo tomará forma en los próximos Presupuestos Generales del Estado y, una vez quede garantizada su financiación por Ley, deberá ser desarrollado internamente a través del Plan Estratégico y el nuevo marco laboral previsto por la dirección de Correos