Esta aceleración del PIB refleja principalmente un repunte de la inversión en inventarios privados y un incremento del gasto de los consumidores. Estos movimientos se han visto compensados en parte por la caída de la inversión fija residencial. Además, las importaciones, que son una resta en el cálculo del PIB, han aumentado. En este sentido, el aumento del gasto de los consumidores muestra aumentos tanto en los servicios como en los bienes. Dentro de los servicios, los principales contribuyentes han sido la atención de la salud, la vivienda y los servicios públicos, y los servicios recreativos. Dentro de los bienes, han destacado los vehículos de motor y sus partes, los bienes recreativos y los vehículos, el mobiliario y el equipo doméstico duradero, y la gasolina y otros bienes energéticos.
El incremento de la inversión en inventarios privados es consecuencia, principalmente, de aumentos en las industrias de comercio al por mayor y comercio al por menor, que se vieron compensados en parte por una disminución en las industrias de minería, servicios públicos y construcción. Dentro de la inversión fija no residencial, los aumentos en los productos de equipo y propiedad intelectual se han visto compensados en parte por una disminución en las estructuras. El avance de las importaciones ha estado liderado por los bienes de capital, excluyendo los automotrices.
El índice de precios de las compras internas brutas ha descendido hasta el 2,3% en el segundo trimestre, en comparación con un aumento del 3,1% en el primer trimestre. El índice de precios de gastos de consumo personal (PCE, por sus siglas en inglés) también ha bajado hasta el 2,6% frente al 3,4% anterior. Excluyendo los precios de los alimentos y la energía, el índice de precios PCE se ha situado en el 2,9% en comparación con 3,7% precedente.
Los ingresos personales en dólares corrientes se han ubicado en 237.600 millones de dólares en el segundo trimestre, en comparación con un aumento de 396.800 millones de dólares en el primer trimestre; mientras que los ingresos personales disponibles han bajado hasta los 186.300 millones de dólares en el periodo desde los 240.200 millones de dólares del primer trimestre.
Las peticiones semanales de desempleo en EEUU han caído hasta las 235.000 en la semana del 19 de julio en comparación con las 245.000 solicitudes de los siete días previos, según los datos publicados por el Departamento de Trabajo estadounidense. El dato se ha situado levemente por debajo de las previsiones del consenso, que anticipaba 238.000.
Por estados, los mayores incrementos se han dado en Texas (+11,927), California (+6,284), Georgia (+3,101), Missouri (+2,999) y Carolina del Sur (+2,413), mientras que las mayores caídas se han registrado en Nueva Jersey (-1,532), Massachusetts (-1,531), Indiana (-1,407), Tennessee (-937) e Iowa (-853). La media móvil de las últimas cuatro semanas se ha situado en 235.500, subiendo simbólicamente desde las 235.250 de la semana anterior.