Según los datos que ha publicado, Siemens Energy ganó 1.477 millones durante los nueve primeros meses del año, con Gamesa como su única filial que cerró en negativo. Las pérdidas de Gamesa, que cuenta con una factoría en Reinosa, alcanzaron los 463 millones entre abril y junio, un 81,9% menos.
La firma ha explicado que el resultado de Gamesa continuó viéndose arrastrado por los problemas de calidad de los modelos de turbinas eólicas 4.X y 5.X, cuya venta paralizó el año pasado tras detectar fallos, lo que provocó que la matriz tuviera que ser rescatada por el Estado alemán.
Junto a estos problemas, Siemens Gamesa también se vio perjudicada por el aumento de los costes de los productos, los problemas de puesta en marcha el área de offshore y la actualización de los modelos estadísticos utilizados para evaluar la flota de aerogeneradores. En los últimos nueve meses hasta junio, Siemens Gamesa facturó 6.926 millones, un 6,5% más, de los que 2.569 millones correspondieron al último trimestre, un 25,1% más. Los pedidos cayeron un 75,3% entre octubre y junio, hasta los 3.111 millones, debido a los problemas con las turbinas, a lo que se sumó la comparativa con el año anterior, cuando las actividades offshore y de servicios registraron pedidos excepcionalmente altos, incluido uno por valor de 2.300 millones. En este contexto, la cartera de pedidos se redujo a 37.000 millones entre abril y junio
Pese a todo, la matriz alemana, Siemens Energy ganó 1.477 millones entre octubre y junio, frente a las pérdidas de 3.632 millones de un año antes, aunque sus resultados continuaron viéndose lastrados por Gamesa, que fue su única filial que cerró en números rojos. Los ingresos de la compañía crecieron un 9,4% en los nueve primeros meses hasta junio, hasta los 24.724 millones, gracias a los servicios y el crecimiento de las nuevas unidades. En el caso de los pedidos, cayeron un 11,7%, hasta los 35.213 millones, debido a Gamesa y la división de tecnologías de redes.