A cambio de una nómina mínima de 1.500 euros, CaixaBank premia con 250 euros a quienes realicen por primera vez la domiciliación en la entidad. Si los ingresos están entre los 900 y los 1.499 euros, la remuneración baja hasta los 150 euros. En ambos casos, hay la obligación de permanecer cuatro años: dos de ellos cumpliendo las condiciones de la ‘Cuenta Nómina’.
Un importe superior es que el ofrecen en Banco Sabadell, de 300 euros para los clientes que domicilien una nómina mínima de 1.000 euros y cumplan con una permanencia de al menos 12 meses.
Pero, actualmente, la mayor bonificación entre los grandes bancos la tienen en Santander. El banco paga con hasta 550 euros en efectivo por domiciliar la nómina. Eso sí, la remuneración varía en función de las condiciones que cumpla el cliente. Si únicamente se domicilia una nómina mínima de 600 euros y dos recibos, el pago es de 300 euros, a los que se sumarían otros 100 euros si los ingresos mensuales superan los 2.500 euros. Para ello hay que permanecer en la entidad 24 meses.
Por su parte, Deutsche Bank otorga 360 euros para los nuevos clientes que domicilien una nómina mínima de 2.000 euros. El pago se hará fraccionado durante 12 meses, con lo que, pese a que no exige una permanencia, habrá que estar en el banco al menos un año para percibir el abono completo.
Cajamar regala 200 euros para nóminas desde los 1.200 euros a 2.500 euros. Si el cliente percibe ingresos de hasta 4.000 euros, el pago será de 300 euros, mientras que si la nómina es superior, la bonificación llega hasta los 500 euros. El compromiso de permanencia es de 36 meses.
Por último, Abanca ofrece, a cambio de una permanencia mínima de dos años, una remuneración de 185 euros para nóminas de entre 800 y los 1.200 euros y de 370 euros para ingresos superiores.