La reciente oleada de ciberataques ha puesto de nuevo el foco en lo desprotegidos que están los datos de los usuarios. Mayo fue un mes negro para algunas compañías del Ibex 35. Tal y como se ha publicado recientemente, Banco Santander detectó un acceso no autorizado a datos de clientes de España, Chile y Uruguay. También Telefónica sufrió una fuga de información de más de 120.000 clientes, mientras que Iberdrola reportó un ciberataque que dejó expuestos datos de 850.000 clientes.
A la lista se suman ciberataques en otras compañías como Decathlon o Ticketmaster, y ni siquiera las instituciones públicas se libran de la voracidad de los hackers. El último ejemplo es el de la DGT: la brecha en su ciberseguridad compromete los datos de 35 millones de conductores y sus respectivos vehículos.