Este Perte es uno de las doce proyectos puestos en marcha por España con el refuerzo de los fondos europeos Next Generation, y Cataluña concentra prácticamente uno de cada tres euros del total. En particular, de acuerdo con los datos del Ministerio de Industria, dirigido por Jordi Hereu, Cataluña ha absorbido 53,4 millones, de los cuales 10,6 millones corresponden a préstamos y 42,8 millones a subvenciones.
En segundo lugar se encuentra la Comunitat Valenciana, con 37,6 millones, y en el tercero Galicia, con 14 millones. En total, se han repartido 183,6 millones de euros a 292 proyectos de 233 empresas que contribuirán a la modernización, sostenibilidad, y digitalización del sector agroalimentario en España.
En el caso de Cataluña, estos fondos permitirán avanzar en la digitalización y desarrollo sostenible del sector agroalimentario catalán y reforzar su liderazgo como referente de una alimentación cada vez más saludable, sostenible y sana. Entre los proyectos que se beneficiarán de las ayudas en Cataluña, destacan los liderados por compañías como Teresa Carles Flax & Kale, Ametller Origen o Heura Foods.
Teresa Carles Flax & Kale, que cuenta con un centro de I+D y con plantas de producción en Bell-lloc d’Urgell (Lleida) y en Fraga (Huesca), lidera un grupo de 25 empresas españolas de siete comunidades que constituyeron un consorcio llamado From Green to Healthy y que han recibido ayudas por un total de 27,6 millones, de los cuales 9,24 millones han sido para empresas catalanas.
Los proyectos primarios que integran esta alianza empresarial se dividen en tres cadenas de valor: una relacionada con las proteínas sostenibles, otra relacionada con las bebidas saludables y una tercera vinculada con la confitería y los postres.
Empresas catalanas como el grupo Teresa Carles Flax & Kale, Biblox, Companyia General Càrnia, Roen Plastic, GasN2 o Industrialización de frutas del Segre integran esta alianza.
El consorcio incluía proyectos con un presupuesto total de 111 millones, pidió 64 millones de fondos cuando se presentó el Perte y pretendía generar unos 1.500 empleos.
Otro de los proyectos destacados de este Perte en Cataluña es el liderado por la compañía alimentaria Ametller Origen, que aglutina a un total de 14 empresas. Esta iniciativa, conocida como Agrosmed, agrupa a empresas como Wall Box Chargers, Heura Foods, Mooma, Orgánicos Pedrin, Venvirotech Biotechnology así como a la cervecera Damm.
Agrosmed se presentó al Perte con 22 proyectos primarios y una inversión global prevista de 43,9 millones. Finalmente, el proyecto ha obtenido 9,88 millones en ayudas, de los cuales 6,23 millones corresponden a empresas catalanas.La iniciativa aglutina a empresas presentes en cinco comunidades (Aragón, Cataluña, Madrid, Murcia y la Comunidad Valenciana) y pretende generar 300 empleos hasta junio de 2025, según sus promotores. El objetivo de esta alianza es la transformación de los procesos a lo largo de la cadena de valor del sector agroalimentario.
En particular, pretende la digitalización de la cadena de valor, la gestión sostenible de residuos (embalajes más sostenibles y reducción de mermas y desperdicios), la reducción del uso de combustibles fósiles para sustituirlos por fuentes de energía renovable, la trazabilidad del producto, la reutilización y recirculación del agua en los procesos productivos, así como la dinamización de la actividad económica y creación de empleo en zonas rurales.
Otro proyecto con representación catalana es AccelerEat, liderado por la compañía valenciana Vicky Foods y que reúne a 18 empresas de nueve comunidades autónomas, entre ellas siete grandes compañías, como Bunge, o pymes como la catalana Carinsa. Esta iniciativa busca acelerar la producción sostenible de nuevos alimentos e ingredientes basados en materias primas alternativas (como nuevas variedades de plantas, insectos, algas, hongos, microorganismos o subproductos), con menor huella ecológica, y obtenidos a través de procesos innovadores y sostenibles de transformación industrial. En total, ha recibido una ayuda total de 19,59 millones, de los cuales 9 millones corresponden a la participación de empresas catalanas.
Un cuarto consorcio empresarial con participación catalana es el proyecto Alimtech, que pretende desarrollar soluciones para hacer frente a necesidades como el alto desperdicio alimentario, el gran consumo de combustibles fósiles o el alto grado de contaminación de los procesos tóxicos de la industria. Dicho proyecto recibirá 8,89 millones, 1,54 millones de ellos para empresas catalanas, entre ellas el grupo Carinsa y Global Fruselva.
Eco Food es otra alianza estratégica que ha recibido fondos del Perte Agroalimentario y que aglutina a setenta empresas de doce comunidades autónomas. El proyecto abordará la I+D+i de las principales cadenas de valor del sector alimentario (vitivinícola, las bebidas, las frutas y hortalizas, los productos cárnicos, los dulces, los lácteos, las panificadoras y la actividad de pesca) y para ello recibirá 12,8 millones en ayudas, 1,22 de ellos para empresas de Cataluña, como BCN Vision, Norarealfood, Cárnicas Ginés o Global Fruselva.