Y es que, Sánchez nunca se pudo imaginar la que se le venía encima con su acuerdo fiscal para salvar a Illa y por ende, salvarse él. El desconocimiento de la realidad catalana, del independentismo visceral en concreto, es uno de los grandes errores de los políticos madrileños. Quizá por ello las relaciones entre unos y otros nunca han sido especialmente brillantes, pero en estos momentos el trilerismo sanchista se tiene que enfrentar a unos rebeldes independentistas que les quieren sacra las muelas en forma de independencia económica a todos los niveles. Y las declaraciones de Montero han sido como el detonante inesperado y tras la contra declaración ha llegado la petición de comparecencia en el Congreso de Montero y Bolaños para que sus explicaciones queden bien claras y sin matizaciones de tres al cuarto
En concreto y en sendos escritos Junts insta a la vicepresidenta y al ministro a informar de la «propuesta exacta» de financiación singular para Cataluña, a la vista de las distintas interpretaciones de lo firmado.
Y descubrir esa carta es lo que lleva evitando el Gobi¡erno desde hace meses , hay que lo único que se sabe es que el documento firmado señala que la Generalitat gestionará y recaudará todos los impuestos que se paguen en Cataluña a través de la Agencia Tributaria Catalana, algo que, a todas luces, es un concierto económico,
Desde el Gobierno tratan de reducir este acuerdo a una «financiación singular» para Cataluña para evitar sufrir más desgaste ya que las voces críticas dentro del PSOE cada vez son más sonoras.
De cualquier forma, habrá que esperar y ver si la petición de Junts sale adelante y que cuentan los ministros a sus señorías. Hasta entonces seguimos sin saber que se ha firmado exactamente.