Prácticamente, desde que empezó el mes de septiembre, el euríbor está retrocediendo debido a las elevadas expectativas de que los bancos centrales aplicasen grandes recortes a los tipos. De hecho, el pasado jueves, la reunión del BCE realizó una nueva bajada de tipos de 25 puntos básicos, apoyando la senda del índice. Se trata del segundo recorte en lo que va de año. El anterior fue en el mes de junio y, ahora, se ha ejecutado otro descuento que baja la tasa de depósito desde el 3,75 al 3,5%.
El dato de este martes, en el 2,948% en tasa diaria, supone un descenso respecto a las anteriores jornadas, con una ligera bajada de 0,027 puntos porcentuales respecto al dato diario del lunes. De todos modos, sigue consolidándose la cifra inferior al 3%, un valor que también anticipan los futuros del euríbor, unos de los indicadores más utilizados por los analistas, para final de año.
Ya desde el pasado cierre del mes de agosto el euríbor había empezado a descontar los nuevos recortes. El índice cerró al 3,166% y registrando la mayor caída mensual desde 2009, ya que julio cerró al 3,526%, una bajada de 0,36 puntos porcentuales.
El euríbor responde al nombre European InterBank Offered Rate y se calcula a través de un panel de bancos europeos que informan todos los días a qué tasa se realizan los préstamos interbancarios. A partir del 2020, los cálculos se realizan de manera híbrida. Se incluyen los datos del panel, pero además las propias estimaciones del propio mercado, con el objetivo de reducir la volatilidad y el riesgo de manipulación, al que estuvieron sometidos estos índices a principio de siglo. El panel está formado por 18 bancos europeos, entre los que se encuentran Santander, BBVA, Barclays, Deutsche Bank o Unicredit.
Todos los días laborales a las once de la mañana se publica al tipo de interés medio en el que las entidades financieras se prestan capital a una semana, un mes, tres meses, seis meses y 12 meses.