El grupo español, a través de su filial VíasChile, se encuentra entre los cuatro finalistas para hacerse con la concesión de esta autopista de peaje, gestionada desde 2008 por Globalvia. Abertis compite por este proyecto con Sacyr, con una posición muy amplia en la gestión de infraestructuras en el país andino, OHLA e Intervial. La inversión estimada de la concesión supera los 500 millones de euros y el plazo explotación máximo es de 45 años.
El proyecto consiste en una autopista de doble calzada que se extiende por 75 kilómetros, desde la Ruta 5 Sur (aproximadamente 11 kilómetros al sur de Chillán) hasta su empalme con la Ruta 150 CH, que une Penco con Concepción, en la Región del Biobío. La iniciativa incluye ampliar la carretera, rehabilitar las calzadas existentes, rectificar trazados y habilitar nuevos puentes y tramos de calles de servicio. Se contempla también una nueva conexión entre la Ruta del Itata y la autopista Concepción Cabrero, en las cercanías del polo urbano de Concepción. De igual modo, el contrato recoge la incorporación de pórticos de telepeaje.
El Ministerio de Obras Públicas de Chile abrirá las ofertas económicas el próximo 11 de octubre y decidirá entonces qué empresa es la adjudicataria de la segunda concesión de la Ruta del Itata.