Desde el comienzo del mes de septiembre, el índice de referencia para las hipotecas ha ido marcando datos a la baja, encadenando caídas que ya predecían un cierre por debajo del 3%, algo que no pasaba desde noviembre de 2022 y que supone el sexo mes de caídas consecutivas.
De hecho, ante esta situación, los mercados financieros ya prevén un desplome del euríbor, llevando al índice hipotecario por debajo del 2% en 2025. En concreto, y a pesar de que en las últimas semanas los expertos se resistían a descontar las últimas bajadas agresivas del índice a medio plazo, los futuros anticipan un euríbor al 1,8% para finales del año que viene.
Y lo mejor de todo es que el euríbor está ya por debajo de las previsiones que se marcaron antes de verano. Es decir, nadie sabe en estos momentos cuando frenara,