En términos del PIB, la ratio siguió mostrando una moderación del endeudamiento, al situarse en un 110,4% (117,7% en el segundo trimestre de 2023), según las Cuentas Financieras de la Economía Española publicadas este miércoles por el Banco de España.
La deuda consolidada de las sociedades no financieras (empresas) aumentó desde los 990.600 millones en el segundo trimestre de 2023 a los 1,003 billones un año después, aunque se redujo en términos del PIB, pasando del 68,7% hasta el 65% en junio de 2024. Si se incluyese la deuda interempresarial, la ratio en el segundo trimestre de 2024 sería del 81,3% frente al 86,6% de un año antes.
Por su parte, la deuda de los hogares e instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares se redujo tanto en términos absolutos, pasando de 707.700 millones en junio de 2023 a 700.500 millones en junio de 2024, como en relativos, situándose al cierre del segundo trimestre de 2024 en el 45,4% del PIB frente al 49,1% de un año antes. Esta evolución de la deuda consolidada de las empresas y de los hogares e instituciones sin fines de lucro al servicio de los hogares se explica, principalmente, por los valores ligeramente positivos de las operaciones netas acumuladas y en menor medida por los otros flujos. El importe de las operaciones netas acumuladas en cuatro trimestres hasta junio de 2024 fue de 5.500 millones, lo que supuso un 0,4% en términos del PIB. Las sociedades no financieras aumentaron su deuda por las operaciones netas en 9.000 millones (0,6% del PIB). A su vez, el efecto de los otros flujos continuó siendo positivo. Por su parte, los hogares e ISFLSH redujeron su deuda y las operaciones netas fueron de -3.500 millones (-0,2% del PIB).
Los activos financieros de los hogares e ISFLSH ascendieron en el segundo trimestre de 2024 a un importe total de 3,055 billones de euros, un 5,6% superior al registrado un año antes. Este aumento reflejó una revalorización de 86.000 millones de euros y una adquisición neta de activos financieros de 77.000 millones con respecto a junio de 2023. Por instrumentos financieros, la revalorización de activos se concentró en gran medida en las participaciones en fondos de inversión y en el capital. En la adquisición neta de activos destacaron sobre todo los depósitos y las participaciones en fondos de inversión. El aumento de los activos financieros fue menor que el del PIB, por lo que la ratio se redujo en 2,6 pp, situándose en el 197,9% del PIB.
En cuanto a la distribución por componentes a 30 de junio, el grueso de los activos financieros de los hogares se mantuvo en efectivo y depósitos (el 35,8% del total), seguido de participaciones en el capital (31%), participaciones en fondos de inversión (15,6%) y seguros y fondos de pensiones (12%). Las participaciones en fondos de inversión fue el instrumento que más incrementó su peso en los activos financieros de los hogares (en 1,1 pp con respecto a un año antes), debido tanto a su revalorización como a las inversiones. En sentido contrario, el peso del efectivo y los depósitos cayó 0,8 pp, a pesar de las operaciones netas positivas en depósitos a plazo.
La riqueza financiera neta de los hogares e ISFLSH, que se obtiene deduciendo sus pasivos de sus activos financieros, se situó en 2,296 billones en junio de 2024, un 7,9% más que un año antes. Con relación al PIB, los activos financieros netos representaron un 148,7%, 1,2 pp más que en junio de 2023.
Las operaciones financieras netas de los sectores residentes (empresas, hogares, instituciones financieras y Administraciones Públicas) mostraron en los últimos cuatro trimestres un signo positivo (financiación neta otorgada) de 70.200 millones de euros, equivalente al 4,5% del PIB, frente al 2% observado en junio de 2023. La financiación neta de las Administraciones Públicas, de -3,6% del PIB en el segundo trimestre de 2024, fue menor a la de -4,4% de junio de 2023. La financiación neta otorgada por los hogares aumentó hasta el 4% del PIB en el segundo trimestre del año, desde un 1,8% un año antes. Las operaciones financieras netas de las sociedades no financieras disminuyeron hasta el 1,5% (frente a un 2,7% de un año antes), mientras que las de las instituciones financieras se situaron en el 2,6% del PIB, superior al 2% de junio de 2023. Dentro de las instituciones financieras, las operaciones financieras netas del Banco de España fueron ligeramente negativas (-0,3%), la financiación provista por las otras instituciones financieras monetarias se situó en un 1,7% del PIB, y la de las instituciones financieras no monetarias en un 1,3%.