En Estados Unidos, los datos de empleo correspondientes al mes de septiembre fueron mucho más fuertes de lo esperado, con gran creación de empleo, bajada del desempleo y subida de los sueldos, lo que ha disipado casi completamente cualquier temor a la recesión en ese país.
En cuanto a Oriente Medio, preocupa el recrudecimiento de las tensiones y la consiguiente subida del precio del petróleo en general.
Por tanto, la búsqueda de activos seguros con el miedo al conflicto en el Oriente Medio, y la mencionada fortaleza económica de Estados Unidos, que disminuye la probabilidad de que haya recortes agresivos en por parte de la Reserva Federal, ha hecho que el dólar se refuerce.
Pensamos que el impacto de la crisis de Oriente Medio será favorable sobre todo para las divisas de países latinoamericanos exportadores de petróleo como México, Brasil y Colombia. El recrudecimiento de esas tensiones llevaría pues a subidas más fuertes aún de las que hemos visto en el pasado. Estos países se benefician de los precios más altos del petróleo, por un lado, y por otro, están lo suficientemente lejos de la zona de conflicto para que sus exportaciones no se vean afectadas.