Es el mensaje que ha lanzado el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, desde Washington en la semana del encuentro anual organizado por el FMI y el Banco Mundial. Preguntado por las negociaciones sobre las cuentas públicas con los distintos socios de Gobierno y la oposición de Junts al impuesto a las energéticas, Cuerpo ha recalcado que el gravamen -que está en el programa de gobierno de PSOE y Sumar- es imprescindible para cumplir con el plan fiscal establecido sin tocar otros impuestos.
Sigo siendo optimista con respecto a un acuerdo global para el presupuesto del año 2025, y lo que se refiere a las figuras tributarias es parte de la negociación. Hay un elemento de responsabilidad fiscal importante, tenemos que ser capaces de cumplir el objetivo de déficit y por tanto esa redistribución de recursos de sectores que están teniendo los mejores resultados de su historia hacia sectores que están necesitando elementos de apoyo es otro elemento fundamental que está en el corazón de esos presupuestos».
Cuerpo ha rechazado precisar qué probabilidades ve de alcanzar un acuerdo, pero se ha mostrado positivo a la vez que ha pedido a Junts, sin mencionarlo, que sea responsable, en pro de que España cumpla con los objetivos fiscales que ha marcado. Este miércoles, también Repsol ha presionado al Gobierno anunciando que retirará las inversiones milmillonarias que tenía previstas en Cataluña si realmente el Gobierno convierte en permanente el impuesto al sector. Y esto entronca con que el Fondo Monetario Internacional (FMI) publicó ayer su nuevo informe de previsiones, en el que apenas prevé que el déficit español se reduzca en los próximos años, algo que Cuerpo justifica en que todavía hay medidas pendientes de aprobar con las que alcanzar lo prometido.
«Esos presupuestos son los que contienen las medidas que sustentan esas previsiones de déficit, esa información adicional hacia delante de las medidas que podrían sustentarlo. Nosotros esperamos que para el 2025, tan pronto como tengamos esos presupuestos sobre la mesa, podamos tener una visión cada vez más convergente. Y además, teniendo en cuenta que estos últimos años España ha ido sobre cumpliendo sus objetivos de déficit conforme teníamos esas sorpresas positivas en el crecimiento». Por el momento, España prevé registrar un déficit del 3% este año -misma previsión que la del FMI- y del 2,5% el año que viene -2,8% según el Fondo-. El ejercicio pasado, el déficit terminó en el 3,66% del PIB. El Ministerio no prevé actualizar sus previsiones macroeconómicas de momento, pese a que las del resto de organismos que suelen publicarlas ya recogen mejores datos que el propio Gobierno. El FMI mejoró este martes sus previsiones de este 2024 para España hasta el 2,9%, dos décimas por encima de las del Gobierno (2,7%). «El FMI sitúa a España como la economía que más crecerá entre las economías avanzadas en este año, y seguiremos liderando el crecimiento dentro del área del euro también el año que viene», se ha congratulado. Sin embargo, Cuerpo ha manifestado que el Gobierno se encuentra «cómodo» con sus pronósticos actuales y que solo valorará revisarlos una vez se conozcan los datos de PIB relativos al tercer trimestre.