La tasa armonizada, por su parte, se incrementó una décima hasta el 1,8%, dos décimas porcentuales por debajo de la media de la eurozona, de modo que el diferencial vuelve a ser favorable a España tras doce meses desfavorable. La tasa subyacente aumentó una décima porcentual hasta el 2,5%, y el núcleo inflacionista, que excluye todos los alimentos y los productos energéticos, se mantuvo en el 2,4%. Tras el mínimo anual alcanzado en septiembre, tal y como se había previsto, la tasa de inflación ascendió en octubre, una décima más de lo esperado. La desviación procedió fundamentalmente de los servicios
Los precios de los alimentos elaborados aumentaron un 0,5% en octubre, en gran medida debido a la reversión parcial de la rebaja del IVA en algunos productos. Su tasa de inflación se mantuvo en el 2,5%. Las mayores subidas se registraron en los platos preparados, así como en el pan y el queso, ambos afectados por la subida del IVA. En cuanto a los bienes industriales no energéticos, su tasa de inflación se elevó ligeramente, impulsada por el encarecimiento de los automóviles nuevos, aunque se mantiene en niveles reducidos.
En los servicios, la tasa de inflación se mantuvo estable en el 3,3%. La subida observada en los paquetes turísticos y en los vuelos internacionales fue contrarrestada por la bajada en hoteles y restaurantes. Los servicios es el grupo que registra en estos momentos la tasa más elevada, y se puede decir que es el único donde todavía persisten ciertas tensiones inflacionistas. Respecto a los componentes más volátiles, la inflación en los alimentos no elaborados aumentó cinco décimas, hasta el 1,3%, también impulsada por la reversión parcial de la rebaja del IVA en varios productos, como huevos, legumbres y hortalizas. Los productos energéticos elevaron su tasa desde el -6,5% en septiembre hasta el -3,7%, por las subidas registradas en todos sus 14 de noviembre de 2024 2 componentes, especialmente en el gas, que se añade a un fuerte efecto escalón derivado de las intensas bajadas de precios que tuvieron lugar hace un año.
En suma, tal y como se esperaba, la inflación aumentó en octubre debido, fundamentalmente, a efectos escalón en los productos energéticos, unido al impacto de la reversión de la bajada del IVA en ciertos alimentos.
Previsiones
El precio del petróleo se ha situado en las últimas semanas en torno a los 73 dólares/barril, ligeramente por debajo del precio contemplado en el anterior escenario central de previsiones. Se mantiene, en todo caso, la hipótesis de dicho escenario, consistente en una cotización de 75 dólares a lo largo del periodo de previsión. Las previsiones apenas se modifican, manteniéndose la tasa media anual esperada en el 2,7% este año y en el 1,8% el año próximo. En noviembre y diciembre volverá a ascender la tasa general de inflación por la actuación de nuevos efectos escalón en los productos energéticos. Las tasas interanuales de diciembre se situarán en torno al 2,5% este año y el 1,7% en 2025.
Las previsiones para la subyacente también se mantienen sin cambios, en el 2,9% y el 2,1% en 2024 y 2025, respectivamente (cuadro 2). En un escenario en el que el precio del crudo asciende hasta los 85 dólares, las medias anuales para dichos años serían del 2,8% y 2,4%. Finalmente, en un escenario en que el precio de esta materia prima baja hasta 65 dólares, las tasas serían del 2,7% y del 1,1%, respectivamente.