La firma especializada en soluciones de software, información y servicios para empresas y profesionales analiza la evolución de este tipo de contratos, especialmente tras el impulso derivado de la reforma laboral: más de 1,2 millones de firmas son fijos discontinuos en lo que va de año. Antes de la reforma, el número de contratos de esta modalidad representaba el 3% y ahora ronda el 14%.
Si el 45% corresponde a jóvenes con menos de 30 años, también destacan el incremento de las firmas de menores de 20 años, que aumentan del 1% al 9% en dos años. A partir de esta edad su uso desciende de forma progresiva hasta representar el 9% del total desde los 45 años y es prácticamente residual entre los sénior.
Tener un fijo discontinuo, pese a ser un indefinido en la normativa laboral, no garantiza plenamente la estabilidad y ello afecta especialmente a los jóvenes. De hecho, la mayoría de los contratos no reanudan la actividad en el mismo puesto una vez finalizado el periodo de desempleo. Sólo el 34% de los fijos discontinuos reciben el llamamiento tras la inactividad y mantienen su puesto.
Los fijos discontinuos tienen un marcado carácter estacional, cada año con unas pautas similares. Los meses de abril, mayo y junio son los que concentran el mayor número de nuevas altas de fijos discontinuos (el 36%), seguidos de marzo y julio (18%). En el otro extremo están los meses de enero, febrero, agosto y noviembre, con el 6% de nuevos contratos de esta modalidad, y diciembre, con el 4%.
La hostelería es el sector que más número de contratos fijos discontinuos concentra, ya que suponen prácticamente la mitad de los contratos fijos discontinuos (el 43%) y representan el 28,4% de la modalidad de contratación en este sector. Le siguen las actividades administrativas y de servicios auxiliares (11%); agricultura, ganadería y pesca (9%); comercio (8%); educación y actividades artísticas y de entretenimiento (6%); actividades profesionales, científicas y técnicas (4%); actividades sanitarias y de servicios sociales, transporte y almacenamiento, industria manufacturera (3%); construcción (2%) e información y comunicaciones (1%).
Tres comunidades autónomas acaparan más de la mitad (el 53,9%) de este tipo de contratos: Baleares, con el 21,1%; Andalucía, con el 17,3%, y Cataluña, con el 15,5%. Les siguen la Comunidad Valenciana (10,2%) y Madrid (9,4%), mientras que el resto muestran cifras menos significativas.
No se aprecian diferencias por sexo, y se reparten prácticamente al 50% entre hombres y mujeres. Sobre el país de procedencia de los trabajadores con contratos fijos discontinuos, los empleados de fuera de España representan el 28,2% de esta modalidad. Del total de nuevos contratos a extranjeros en 2024, el 20% han sido fijos discontinuos, mayoritariamente procedentes de Europa (38%), África (30%), Sudamérica (19%) y América del Norte (7%).