En efecto, de mantenerse la lectura mensual de noviembre del +0,3%, la cifra anual se situaría en el 3,5%, muy por encima del objetivo del 2% fijado por la Reserva Federal.
Sin embargo, el informe revela un detalle inesperado: el principal componente de la inflación – el alquiler (~75% del componente de vivienda) – registró el menor aumento mensual en tres años. Dado que la inflación de la vivienda es el componente más importante y rígido de la inflación estadounidense, si sigue cayendo podría llevar a la inflación subyacente a cruzar la barrera del 2% a finales de 2025. No faltan motivos para el optimismo.