El recorte de los tipos en enero por parte del BCE desencadenó este nuevo movimiento a la baja de los tipos Euribor, y el temor a los aranceles de Trump frente a las noticias europeas ha llevado a los mercados a reajustar algo a la baja sus expectativas sobre la tasa terminal a la que el banco central pondrá fin al ciclo de recortes. Aunque reconocemos la debilidad de la economía de la eurozona, creemos que será difícil que los tipos bajen mucho más a partir de ahora. Los problemas económicos de la zona euro tienen poco que ver con los tipos, y el último informe de inflación confirmó la rigidez de las presiones inflacionistas aquí.