El sistema protegerá los satélites en servicio del posible impacto con restos de otras misiones que orbitan de forma incontrolada a gran velocidad y que pueden llegar a dañarlos o inutilizarlos. También contribuirá a protegerlos, vigilando cualquier intento de otros satélites de aproximarse para comprometer su misión o recoger información sobre ellos.
Indra, a través de su filial alemana, fue invitada a participar en esta licitación, en la que resultó seleccionada. El Mando del Espacio alemán (WRKdoBw) será el encargado de operar este radar de vigilancia espacial, accediendo en remoto desde el centro de situación espacial (WRLageZ) situado en Uedem.
Los datos sobre objetos en órbitas cercanas a la Tierra se catalogarán y servirán de base para hacer un seguimiento dedicado a objetos de interés. Se empleará para ello, de forma combinada, el radar de Indra y otros sensores adicionales con los que cuenta el país, como los telescopios recién adquiridos, que forman una red de sensores para el conocimiento de la situación espacial.